Partido X, Red y Vox coinciden en achacar a los medios su derrota en las elecciones

No todos han podido pescar en las aguas revueltas del bipartidismo. Frente al sorprendente éxito de Podemos, Ciudadanos y Primavera Europea —que, con una modesta campaña basada en las redes sociales, han conseguido acceder a Estrasburgo con cinco, dos y un eurodiputado respectivamente—; otras tres formaciones han perdido esta carrera electoral, pese a que a aspiraban a entrar en el Parlamento de la UE impulsados por la visibilidad de sus líderes. Ni Hervé Falciani (Partido X), ni Elpidio Silva (Movimiento Red), ni Alejo Vidal-Quadras (Vox) han recabado el apoyo suficiente para sentarse en la Eurocámara. Han fracasado en su intento. Y sus tres equipos, al diagnosticar las causas de la derrota, comparten un mismo culpable: los medios de comunicación y, más concretamente, las televisiones privadas.

A estas, de hecho, sus dirigentes se refieren como la prensa "del régimen". "No hemos tenido los mismos medios para llegar, como sí lo han tenido otros grupos", recalca Santiago Abascal, secretario de organización de Vox, que apunta directamente a Podemos, la gran revelación de la cita electoral. "Los medios de comunicación del sistema han dado la voz a una alternativa antisistema", remacha el representante de un partido que se quedó a las puertas de Bruselas. Diez formaciones lograron entrar y Vox fue la undécima que más votos obtuvo: 244.929 (el 1,56%).

Abascal evita utilizar la palabra fracaso, prefiere hablar de "decepción". "Es cierto que en estas elecciones no hemos satisfecho nuestras expectativas porque esperábamos conseguir un eurodiputado. Pero nos hemos quedado a solo 3.000 votos de conseguirlo", añade el secretario de organización. Con un presupuesto de 750.000 euros para estos comicios, el mayor de los emergentes; la formación colocó como cabeza de lista a Vidal-Quadras, exdiputado en la UE con el PP durante la última legislatura y habitual de las tertulias de televisión.

Desde su constitución, Vox se ha situado a la derecha de los populares —a los que califican de "socialdemócratas"—. "Ahora hace falta una verdadera derecha que se posicione frente a la alternativa soviética y chavista de Podemos", sentencia Abascal, que enumera las veces que Pablo Iglesias apareció en La Sexta y Cuatro durante los últimos días de la campaña.

Hace falta una derecha que se posicione frente a la alternativa soviética y chavista de Podemos Santiago Abascal, secretario de organización de Vox

El mensaje de Elpidio Silva (Movimiento Red) también se centra en la sorpresa del 25-M. El juez, imputado por prevaricación por ordenar el ingreso en prisión de Blesa, ha rehusado valorar a EL PAÍS los resultados electorales, pero en Twitter ha apuntado a Podemos. "Así no vamos bien. Así NO Podemos", escribía en la red social el magistrado, que acusaba a la prensa de hacerles "invisibles" y "boicotearles". A "sucios ataques mediáticos" también se refería en un comunicado publicado tras los comicios. En estos, Red consiguió más de 105.000 votos (0,63%), pero se quedó lejos de Primavera Europea, la formación que menos apoyó consiguió de las diez que accedieron a la Eurocámara —recabó unos 300.000—.

En la idea del silencio mediático ahonda Simona Levi, la dos del Partido X, que presentó como número uno a Hervé Falciani (Montecarlo, 1972), el ingeniero informático que adquirió una gran dimensión mediática tras desvelar una lista con la identidad de 130.000 evasores fiscales que eran clientes del banco británico HSBC. "Los grupos que han tenido acceso a las grandes cadenas han conseguido una influencia muy fuerte. Aquí, las televisiones privadas no respetan la Ley Orgánica del Régimen Electoral General [en referencia a la pluralidad]", insiste Levi, que admite el "fracaso" de su grupo a la hora de entrar en Estrasburgo.

La portavoz de la formación, que consiguió 100.115 votos (0,64%) y fue la decimoquinta más respaldada —RED la decimocuarta—, compara también su presencia en los medios con la del partido de Pablo Iglesias. Pero matiza: "No le reprochamos nada a ellos, ni le quitamos méritos. No pedimos que no tengan ese tiempo, pero sí el mismo para nosotros".