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La lluvia, el granizo y la nieve afectarán a la Península y Baleares hasta el viernes

La DGT prohíbe el paso a camiones y vehículos pesados en las carreteras de peaje AP-6, AP-51 y AP-61 por las precipitaciones intensas

La presa de la Trinidad de Arre, en Villava (Navarra), este domingo.
La presa de la Trinidad de Arre, en Villava (Navarra), este domingo.EFE

Las borrascas que afectan estos días a España sacudirán la Península y Baleares al menos hasta este viernes 13 de abril, un día más de lo inicialmente previsto, según ha informado este lunes la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Estos frentes irán dejando precipitaciones prácticamente generalizadas y localmente intensas durante toda la semana. La cota de nieve oscilará de forma notoria por lo que, dependiendo de los días, las precipitaciones podrán ser de nieve en cotas relativamente bajas para la época del año, o producirse deshielos asociados a las lluvias. Además, este lunes la Dirección General de Tráfico (DGT) ha prohibido el paso a camiones y vehículos pesados en las carreteras de peaje AP-6, AP-51 y AP-61 por las precipitaciones intensas de granizo y nieve. En estas vías de la red estatal se ha decretado aviso amarillo porque los pavimentos se encuentran deslizantes.

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Las restricciones a la circulación para este tipo de vehículos se aplica, según la información de Tráfico de las 14.30 horas, en la AP-6 y en la AP-61, en ambas desde San Rafael a Labajos, en la provincia de Segovia, mientras que en la AP-51 la circulación está prohibida a camiones y articulados desde Villacastín (Segovia) a Ávila. La nieve también afecta, aunque en menor grado (nivel verde), a la A-1, A-62, N-1 y N-6, vías donde Tráfico ha pedido precaución y donde no hay ningún tipo de restricciones. En concreto, la DGT pide precaución en la A-1 desde Villariezo a Villafría, en la provincia de Burgos, y en la A-62 desde Villagonzalo Pedernales a Villaquirán de los Infantes, también en Burgos. 

Hasta 15 comunidades han estado o están este lunes en alerta amarilla (riesgo) por nevadas y por temporal marítimo y olas que alcanzarán hasta cinco metros. Castilla y León tiene aviso amarillo en todas sus provincia, salvo Valladolid y Palencia, por nevadas que dejarán una acumulación de entre siete y 18 centímetros en amplias zonas del Sistema Central, de la Cordillera Cantábrica, los Montes de León y Sanabria, en cotas por encima de los 1.000 metros. Madrid está con alerta por nieve en la sierra que dejará una acumulación de 12 centímetros en 24 horas, sobre todo en altitudes superiores a los 1.200 metros.

Las comunidades de la mitad norte peninsular como La Rioja y Navarra y las provincias de Huesca (Aragón), Cuenca y Guadalajara (Castilla-La Mancha), Lérida (Cataluña) y Cáceres (Extremadura) mantienen el aviso amarillo por nieve por encima de los 1.000-1.400 metros. Las Islas Canarias, Islas Baleares, Cantabria, Murcia, País Vasco y las provincias de Almería (Andalucía), Tarragona (Cataluña) y A Coruña y Pontevedra (Galicia) han activado el aviso por mala mar y olas que subirán hasta los 3/5 metros. La Aemet avisa de que con la alerta amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.

También las carreteras nacionales N-1 y N-6 permanecen "transitables con precaución". Por un lado, la N-1 desde Villafría a Ameyugo, en Burgos, por las nevadas; y la N-6 a la altura de San Rafael (Segovia) por la niebla. Asimismo, la nieve ha obligado a cerrar tres puertos de montaña: Puerto de Lunada a la altura de La Concha, en Cantabria; Puerto de Honduras, en el tramo que va desde Hervás a Garganta la Olla, en Cáceres; y Puerto de Larrau a su paso por Ochagavía, en Navarra.

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Durante este lunes las lluvias están afectando a extensas zonas de la Península, excepto al tercio sur y área mediterránea, donde están siendo escasas. La cota de nieve está subiendo hasta mantenerse por encima de 1.000 o 1.200 metros prácticamente todo el día.

El martes seguramente será el día en el que las precipitaciones serán más generalizadas, extendiéndose de oeste a este y alcanzando Baleares al final de la tarde. Además, podrán ser abundantes en los sistemas montañosos peninsulares y en el área del Estrecho. La cota de nieve comenzará a disminuir por el noroeste situándose al final alrededor de 1.000 metros en numerosas zonas del cuadrante noroccidental.

El miércoles la mayor probabilidad de precipitaciones corresponderá al nordeste de la Península, donde podrán ser fuertes, a zonas altas del interior del sureste y a Baleares; en el resto de las zonas se espera que las precipitaciones sean ocasionales y débiles. La cota de nieve se mantendrá baja, en torno a 800 metros durante la noche en el interior del cuadrante noroccidental, subiendo a lo largo del día. En el nordeste se mantendrá en torno a los 1.000 metros.

Durante el jueves y el viernes los modelos apuntan a que pasaría una nueva borrasca. Aunque aún hay incertidumbre respecto a las zonas que se verían más afectadas, lo más probable es que el frente asociado entre por el oeste y suroeste, extendiéndose hacia el nordeste y llegando a afectar el viernes también a Baleares. La cota tiende a subir rápidamente situándose seguramente por encima de los 1.300 o 1.500 metros. 

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