Un torero invita a todos los escolares de Gerena (Sevilla) a una corrida

Enrique Leal tiene 10 años y estudia quinto de primaria en el colegio público Fernando Feliú de Gerena (Sevilla). Ha sido la primera vez que ha ido a una corrida de toros. "Es impresionante, sobre todo cuando lo matan", asegura. A su vera, Ernesto Requena, de ocho años y también de Gerena, añade: "Es increíble cuando se lo llevan", dice sin dejar de mirar al ruedo. Fernando y Ernesto son dos de los niños de esta localidad que este sábado acudió a la plaza de toros de Palos de la Frontera (Huelva) invitados por su paisano y torero, Manuel Escribano.

A través del centro escolar, el matador invitó hace unos 10 días a 60 escolares a que acudieran con sus padres a la sexta corrida pinzoniana, que se celebra en honor al descubrimiento de América. Ante las quejas de algunos padres y profesores y ante la denuncia del Partido Animalista (Pacma) y Ecologistas en Acción por la participación del colegio en la convocatoria, lejos de dar un paso atrás, el diestro decidió ampliar la invitación a todos los niños de la localidad. “Independientemente de la edad que tengan, y más en Andalucía. Están todos invitados”, defiende Escribano.

En apoyo al torero, la corrida ha comenzado con el paseo de una veintena de niños de entre 13 y seis años, con una pancarta en la que se leía Sí a los niños, sí a los toros. El paseo ha ido acompañado de los aplausos de los asistentes. “Mi intención es que cualquier niño, haya acudido o no antes a los toros, pueda conocer personalmente este mundo y decidir si le gusta o no”, se justifica el torero.

"Es decisión de los padres llevar a sus hijos o no a los toros. Cada cual es libre. Después, ellos decidirán si les gusta o no. Más agresividad hay en el fútbol", apunta la abuela de Fernando, Paula Vargas. "Y hoy hemos querido traerlo por primera vez para apoyar el toreo y acabar con esta polémica", dice.

La invitación de Escribano a través del colegio despertó las críticas de Pacma y Ecologistas en Acción. “Si ya las corridas nos parecen aberrantes, que se use un colegio público me parece de una ética ínfima”, asegura el coordinador del partido, Javier Sanabria. “Solo informé sobre un acto cultural como hace un par de años hice cuando llegó un circo al pueblo o, periódicamente, de las actividades de la banda municipal de música. El colegio es el mejor medio para que los vecinos se enteren. Pero, se pongan como se pongan, es una actividad cultural”, defiende la directora de este centro de infantil y primaria, María Joaquina García, quien apunta que la excursión incluía una visita a las carabelas de Colón, actividad que la organización no reconoce y de la que no se informaba en la octavilla repartida, según García, entre los niños a partir de cinco años. “Escribano me dio 15 euros para imprimir los papeles, no hemos gasta ni un euro del colegio”, afirma la directora antes de señalar que los profesores que no quisieron entregar la octavilla no lo hicieron.

De 7.200 habitantes y situada a 30 kilómetros de la capital andaluza, Gerena es uno de los municipios españoles con mayor tradición taurina, según apunta el concejal de Cultura, el socialista Juan Manuel Illacucci. “Hay pocos pueblos en España tan taurinos. En Gerena, hay mucha gente que trabaja y vive del mundo del toro. El Ayuntamiento respeta la libertad que tienen los padres para llevar a sus hijos a los toros. Es igual que otra actividad cultural, la vemos una más. La tauromaquia es una actividad completamente legal, no hay restricciones en este sentido”, defiende el edil.

Pacma ha presentado un escrito ante la Consejería de Educación al entender que la participación del centro en esta actividad vulnera los preceptos de la educación pública de Andalucía, que "ponen de manifiesto la importancia de desarrollar en el niño el afecto y consideración hacia el resto de los seres vivos". Asimismo, se acogen a las últimas resoluciones de la ONU sobre tauromaquia y menores. “Naciones Unidas ya ha mostrado su preocupación por cómo las corridas pueden afectar el bienestar mental y emocional de los pequeños e insta a los Gobiernos a tomar medidas para proteger a los niños”, apunta Sanabria. Pacma hace referencia a las resoluciones del Comité de las Naciones Unidas de los Derechos del Niño en esta materia de Portugal, México y Colombia (la de España se espera para el próximo año). Al país vecino, por ejemplo, le recomienda incrementar la edad de seis años para acudir a una corrida. En España, como recuerda Unicef, las comunidades autónomas son las que deciden la edad mínima para formarse en escuelas taurinas o asistir a corridas, ya que el reglamento estatal no alude a las edades de acceso.

“Veo ilógico establecer una edad. Cada cual hace lo que quiere y los padres tienen toda la libertad del mundo para decidir si quieren que sus hijos vayan o no a los toros. Es cierto que un toro impresiona, yo aún recuerdo el primer contacto con uno. Pero los niños no se fijan en la sangre”, asegura el diestro, quien también sale al paso en defensa del toreo tras la decisión de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, de retirar la subvención municipal para la escuela taurina. “Es absurdo todo lo que se está moviendo contra el toro. A estos son los que menos les preocupan. No hacen nada por el toro, no lo han visto, no lo protegen, no lo cuidan”, afirma. “Cada persona sabe lo que quiere, que cada uno decida, nosotros no obligamos. Lo que pedimos es que nos dejen tranquilos”, afirma.