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Gallardón asegura que la declaración de los ‘abertzales’ no supone ningún avance

El ministro de Justicia reitera que la disolución de ETA "es una exigencia y no un paso"

“No ha supuesto ningún avance”. Esto es lo que opina el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, de la declaración hecha este domingo por la izquierda abertzale. Por primera vez, los independentistas hicieron autocrítica de su actitud con las víctimas de ETA, pero no le pidieron a la banda que desaparezca. Para el ministro, la disolución de la organización terrorista es "una exigencia y no un paso".

Gallardón ha asegurado en una entrevista concedida a Telecinco que mientras ETA siga existiendo “no puede haber ninguna interlocución del Gobierno con nadie que pertenezca a esa banda". Además ha recordado que, hasta que no se produzca esa disolución, "no hay ninguna legitimidad para pedir ninguna medida de gracia, ninguna modificación de régimen penitenciario, ni absolutamente nada".

En su opinión, “sigue siendo indefendible esa equiparación que se pretende hacer, desde un discurso que es mentira, de unas y otras víctimas, como si la historia no nos tuviese suficientemente acreditado que aquí lo que hay son víctimas y verdugos”.

Con estas palabras, el titular de Justicia ha seguido la línea emprendida ayer por el Ministerio del Interior, el Gobierno vasco y los principales partidos. Socialistas y populares recibieron la declaración de la izquierda abertzale con críticas, mientras el PNV mostró cierto escepticismo. El presidente de esta última formación, Iñigo Urkullu, ha valorado esta mañana el paso de la izquierda abertzale en el acto del Kursaal de San Sebastián, pero ha matizado que "no es el que necesariamente tiene que dar". Al ser entrevistado en Onda Vasca, le ha pedido que sea "audaz" y le ha advertido de que "no espere que se le aplauda como si fueran héroes". Asimismo, ha calificado de "desgobierno" la situación que se vive en la Diputación y en los Ayuntamientos gobernados por Bildu.

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'Caso Urdangarin'

Ruiz-Gallardón también ha hablado durante su entrevista del hecho de que el duque de Palma, Iñaki Urdangarin, mencionara los nombres de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y del expresidente de la Generalitat valenciana Francisco Camps, durante su declaración de este fin de semana. El ministro ha asegurado que no ha visto "en ninguna declaración nada nuevo ni distinto de aquello que previamente era conocido".

Gallardón ha defendido que ante este procedimiento judicial, como ante cualquier otro, el Gobierno debe tener "una actitud de profundo respeto", y se ha remitido a las palabras del Rey Juan Carlos en su discurso de Nochebuena, cuando defendió "la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley, con respeto siempre a las actuaciones del poder judicial".

Por último, ha confirmado que el Ejecutivo "no tiene entre sus prioridades ninguna modificación del estatus de la Familia Real". Su objetivo es llevar a cabo "un gran programa de reforma de la Administración de justicia que pasa no sólo por una nueva legislación" sino por desarrollar un mecanismo que "evite dilaciones indebidas".

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