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El Gobierno renueva el trato “excelente” con Marruecos

El ministro de Exteriores marroquí rechaza los campos de acogida para inmigrantes

El ministro de Asuntos Exteriores Josep Borrell (izquierda), junto a su homólogo marroquí Nasser Bourita, durante una rueda de prensa celebrada este jueves en Rabat.Vídeo: JUANJO MARTÍN (EFE) / EFE
Francisco Peregil

El nuevo Gobierno de España pretende continuar la “excelente” relación con Marruecos, “profundizarla y diversificarla”. Ese es el mensaje explícito que los ministros españoles de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y el de Interior, Fernando Grande-Marlaska, han transmitido este jueves a sus respectivos homólogos, Naser Burita, y Abdeluafi Laftit, en su visita.

Ni la situación del Sáhara Occidental —cuyo territorio debería quedar al margen de cualquier acuerdo de pesca entre Marruecos y la Unión Europea, según el Tribunal de Estrasburgo— ni las llegadas masivas de pateras a las costas españolas, ni las durísimas condenas que han sufrido esta semana 53 detenidos del Rif, ni la dificultad para fijar una visita de Estado a Marruecos del nuevo presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de los Reyes de España, han enturbiado las relaciones entre ambos países.

El tema más candente que hay sobre la mesa, sobre todo para el Ministerio español del Interior, es el de la inmigración. El presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani, declaró el martes que la Unión Europea debe crear campos para inmigrantes fuera de la UE, donde “distribuya” a quienes tienen derecho al asilo en el bloque comunitario.

Tras el encuentro entre Borrell y el ministro de Exteriores marroquí, Naser Burita, los periodistas preguntaron a Burita si Marruecos estaría dispuesto a instalar en su territorio esos campos. Burita ha señalado que Marruecos “siempre ha rechazado y rechaza” esos centros. Y ha añadido que el problema de la inmigración debe plantearse “lejos de soluciones fáciles y mecanismos contraproducentes”.

En una comparecencia previa ante periodistas españoles, Borrell ha indicado que la colaboración entre los dos países en inmigración es “excelente”. “Es cierto que en el último año han aumentado considerablemente las llegadas a España por mar. Y creo que el año pasado las cifras fueron más altas, rondando las 29.000 llegadas. Ahora llega el buen tiempo y ya saben que es de prever que aumenten. En la medida en que la vía de Libia está más cerrada que en años anteriores, pues probablemente tengamos que enfrentarnos a un aumento de las llegadas por mar", ha indicado, a lo que ha añadido: "Pero estamos seguros de la colaboración de las autoridades marroquíes para intentar controlar este flujo, respetando los derechos humanos de los inmigrantes, pero también manteniendo el control de nuestras fronteras”.

Borrell también ha contestado a una pregunta acerca de las condenas pronunciadas esta semana por el Tribunal de Apelaciones de Casablanca sobre 53 manifestantes que participaron hace un año en las manifestaciones del Rif. Cuatro de los presos detenidos sufrirán prisión firme de 20 años. Para el resto, las penas van de 1 a 15 años. El ministro ha respondido: “Este es un tema interno que compete al poder judicial marroquí, que está todavía en un proceso pendiente de apelación”.

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En relación con el Sáhara, cuestión primordial en la política interior y exterior de Marruecos, Borrell ha expresado su intención de continuar el mismo camino trazado por anteriores Gobiernos: “Este es un tema de Estado en el que la política del Gobierno sigue siendo la misma. El Gobierno español defiende la centralidad del papel de las Naciones Unidas en este tema y espera y desea que se encuentre una solución política apoyando el trabajo que hace el secretario general de las Naciones Unidas”.

Fuentes de Exteriores que solicitaron hablar con la condición del anonimato han indicado que son conscientes de la inquietud que ha podido generar en Marruecos la llegada de un nuevo Gobierno con los votos de partidos como Podemos, que se han mostrado desde siempre muy críticos con la política de Rabat en el Sáhara Occidental. “Este es un Gobierno socialista, no es un Gobierno del PSOE y Podemos”, ha añadido.

En cuanto a la posible visita a Marruecos del presidente Pedro Sánchez y de los Reyes de España, Borrell ha indicado que el problema es “cruzar las agendas” y que espera que se realicen en breve.

Tras el encuentro por la mañana entre Borrell y Burita estaba previsto el de Grande-Marlaska y Abdeluafi Laftit. Fuentes diplomáticas han indicado que, además de las cuestiones migratorias ambos ministros abordarían la colaboración contra el terrorismo islamista y contra el tráfico de drogas. “La colaboración policial es buenísima desde hace muchos años”, ha señalado un diplomático. “Se hacen muchas operaciones conjuntas. Y eso conlleva una confianza plena. Los policías no se limitan a intercambiar datos sino que actúan de forma conjunto en el momento. Eso es muy valioso para los dos países”, ha dicho.

Grande-Marlaska también se mostró satisfecho tras su encuentro con el responsable del Interior marroquí. “Hemos venido con el propósito de conocernos y de avanzar un poquito más en las relaciones. Las relaciones España-Marruecos trascienden a quienes ocupemos un cargo en un momento dado”.

Respecto a la promesa planteada por el Gobierno español de retirar las concertinas de las vallas en la frontera con Marruecos, el ministro matizó: “Esta es una cuestión de fronteras. Y afecta a dos países, no a uno. Se tienen que convenir las condiciones de seguridad de las dos fronteras entre los dos países. Siempre he dicho que íbamos a tomar medidas alternativas que garanticen la misma efectividad, el mismo nivel de seguridad”.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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