_
_
_
_
_

El Rey defenderá el libre comercio frente al proteccionista Trump

Felipe VI recordará al inquilino de la Casa Blanca que España tiene déficit comercial con Estados Unidos

Felipe VI pronuncia un discurso en una cena oficial, este domingo, en San Antonio, Texas.
Felipe VI pronuncia un discurso en una cena oficial, este domingo, en San Antonio, Texas.Zipi (EFE)

El Rey se enfrenta a un difícil reto en su primer encuentro con Donald Trump, este martes en Washington: defender las bondades del libre comercio frente al proteccionismo de un presidente que ha puesto en solfa el orden mundial construido tras la Segunda Guerra Mundial bajo el liderazgo de EE UU y ha iniciado una guerra comercial que está abriendo fisuras entre los aliados.

Más información
Un borbón en el país de sus antepasados
El principio del fin de un reinado
La Casa del Rey expresa su “respeto absoluto” a la independencia judicial tras la sentencia de Nóos

Felipe VI, que acudirá a la Casa Blanca acompañado por el nuevo ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Josep Borrell, esgrimirá ante Trump un argumento que este puede entender, según fuentes diplomáticas: España ‘no roba’ a Estados Unidos. Es decir, al contrario de lo que sucede con China, la UE, México o Canadá, la balanza comercial de bienes es favorable para Washington. Salvo en 2014, España ha tenido en los últimos años un déficit crónico en su intercambio de mercancías con EE UU que en 2016 alcanzó los 1.688 millones de euros. Por otro lado, el stock acumulado de inversiones españolas en EE UU (60.259 millones en 2015) es superior al de las inversiones estadounidenses en España (47.323 millones).

A la vista de estos datos, el Rey esgrimirá ante Trump que la relación entre ambos países en mutuamente beneficiosa, pero la situación puede cambiar con la imposición de aranceles al acero y aluminio (del 10% para las importaciones de la UE) o la amenaza de ampliarlos a los automóviles y sus componentes.

Lo más doloroso para Madrid es la decisión de la Administración Trump de aumentar del 21,6% al 34,7% el arancel a la aceituna negra de mesa española, ya que se trata de la primera vez que se cuestionan las ayudas de la Política Agrícola Común (PAC). España, que ha pedido el apoyo de sus socios europeos, cree que aún hay posibilidad de frenar esta medida (que dejaría a los productores españoles fuera de un mercado donde vendieron por más de 60 millones en 2017) si la Comisión de Comercio Internacional estadounidense concluye en julio que la importación de aceitunas españolas no ha dañado a sus competidoras californianas. Una solución que, admiten las fuentes consultadas, resulta muy difícil.

Más allá de las relaciones comerciales, el Rey hará valer ante Trump la cooperación de España en materia de defensa y seguridad y la presencia en las bases de Rota (Cádiz) y Morón de la Frontera (Sevilla) de cuatro destructores lanzamisiles y una fuerza de reacción rápida del Cuerpo de Marines que resultan esenciales para los planes del Pentágono en el Mediterráneo, Oriente Medio y África, gracias a un acuerdo bilateral de cuya última versión (1988) se cumplen ahora 30 años.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El Rey acude a la Casa Blanca tras completar una gira por Nueva Orleans (Luisiana) y San Antonio (Texas), donde ha puesto en valor el origen español de ambas ciudades, que conmemoran el tercer centenario de su fundación, y la contribución de España a la independencia de EE UU, lo que hará también ante Trump, pese a que este muestre escasa sensibilidad hacia el componente hispano de su país, como muestra la supresión del castellano en la página web de la Casa Blanca.

Felipe VI y Trump no se conocen personalmente ya que, aunque ambos acudieron en enero pasado al foro económico de Davos (Suiza), no llegaron a coincidir. El formato de la visita de los Reyes a la Casa Blanca, calificada oficialmente como “de trabajo”, será similar a la que hicieron en 2015, invitados por Obama. Con una diferencia: en el Despacho Oval no solo estarán el Rey y Trump, sino tamnién la reina Letizia y Melania. A continuación, habrá una reunión de las dos delegaciones –en la que participarán el secretario de Estado, Mike Pompeo, y el ministro Borrell, entre otros— mientras las primeras damas, que tampoco se conocen, mantienen una entrevista paralela.

Está previsto que el Rey reitere a Trump la invitación para que visite España que ya le hizo Rajoy cuando estuvo en la Casa Banca, en septiembre pasado. También se espera que el mandatario estadounidense reafirme su apoyo a la unidad de España (“España es un gran país y debería permanecer unido”, dijo Trump ante Rajoy), aunque la crisis catalana ya no esté en el punto de ebullición de entonces. En su apoyo a la unidad de España, la Administración Trump no se ha apartado un milímetro de la línea marcada por Obama.

La visita de Felipe VI a la Casa Blanca se produce en una fecha muy especial: este martes se cumple el cuarto aniversario de su proclamación, el 19 de junio de 2014. Pero el Rey no tendrá tiempo de celebrarlo. Antes de regresar a Madrid se entrevistará con los presidentes del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, Jim Yong Kim y Luis Alberto Moreno, con el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, con el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, y con la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Un maratón de citas con lo más granado de Washington que no se ha cerrado hasta última hora.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_