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Un hombre finge su propio secuestro en Dos Hermanas para justificar un fin de semana de alcohol y drogas

El presunto autor de un delito de simulación inventó que fue asaltado y retenido sin comida cinco días

Agentes de la Policía Nacional llegan al juzgado de Dos Hermanas, en una foto de archivo.
Agentes de la Policía Nacional llegan al juzgado de Dos Hermanas, en una foto de archivo.Paco Puentes

Un hombre atado de pies y manos se presentó el pasado martes en un colegio de Dos Hermanas, en la provincia de Sevilla. Pedía auxilio, exhausto. Cuando finalmente limpiadoras del centro acudieron a ayudarlo, el hombre les contó que lo habían secuestrado, que llevaba cinco días encerrado sin comida y que le pedían dinero. Pero todo era mentira, según ha informado la Policía Nacional este martes: el hombre se lo había inventado para justificar un fin de semana de alcohol y drogas en locales de Sevilla. Los agentes han detenido al hombre como presunto autor de una simulación de delito.

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La presunta víctima, identificada con las iniciales D. P. A., contó a la policía que estaba estacionando el vehículo de su jefe, en la localidad de Dos Hermanas, cuando tres personas con acento extranjero le asaltaron, le agredieron y le amenazaron con una pistola, le colocaron una capucha y lo introdujeron en una furgoneta. El hombre aseguró que pudo ver, antes de que le pusieran la capucha, como se llevaban el turismo que estaba estacionado.

De allí, supuestamente, lo llevaron a una habitación oscura y húmeda, donde, según D. P. A., permaneció cinco días sin comida. Los secuestradores, según su relato, se comunicaban con él solo para pedirle dinero. 

Los hechos sucedieron el pasado 23 de enero, cuando en la sala de emergencias 091 recibieron una llamada en la que se alertaba de que una persona había sido liberada tras un secuestro y se encontraba atada de pies y manos en las puertas de un colegio. Un patrullero se desplazó hasta el centro escolar, donde pudieron hablar con la supuesta víctima, que después fue trasladada al hospital.

Para identificar y detener a los secuestradores, varios agentes, entre ellos, miembros de Policía Judicial y la Policía Científica, se dirigieron hasta el lugar que señaló el hombre. Pero después de entrevistar al personal del centro escolar, a la familia de la supuesta víctima y al jefe del hombre, los investigadores consiguieron desmontar su coartada y averiguar que había estado todo el fin de semana de fiesta entre locales de Sevilla y de Dos Hermanas, consumiendo alcohol y drogas. Los agentes localizaron también el vehículo de su jefe estacionado en las proximidades de uno de los bares de copas de la localidad nazarena donde había estado.

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