El Supremo rechaza la excarcelación de Junqueras y Sànchez para ir al pleno de investidura
Llarena considera que sigue habiendo peligro de "manifestaciones violentas" si los presos acuden al Parlament
Oriol Junqueras y Jordi Sànchez, los dos diputados electos del Parlament catalán que siguen encarcelados, no podrán acudir este martes al pleno de investidura, pero podrán delegar el voto como ya hicieron en la sesión de constitución de la Cámara. El Tribunal Supremo ha vuelto a denegar el permiso extraordinario de salida de prisión solicitado por Junqueras y Sànchez para asistir al pleno. El magistrado ha desestimado los recursos de reforma que habían presentado los dos diputados junto al exconsejero de Interior Joaquim Forn (que luego renunció a su escaño) contra el auto del 12 de enero de 2018, en el que Llarena declaró la incapacidad legal prolongada de los encarcelados para asistir a los debates y las votaciones del pleno del Parlament.
En su auto de este lunes, el magistrado repite los argumentos que ya utilizó en la anterior resolución. Según el juez, la salida temporal de la cárcel de Junqueras y Sánchez pondría en riesgo “la persistencia y reiteración delictiva que trata de conjurar la medida cautelar de prisión provisional". Esos permisos "resultan irreconciliables" con la actuación social y política de los imputados, asegura Llarena.
Como ya dijo en su auto del 12 de enero, el juez considera que la excarcelación temporal de los dos diputados electos podría dar lugar a “movilizaciones ciudadanas colectivas violentas” que pongan en peligro la convivencia ciudadana, pero recuerda que tienen derecho a pedir a la Mesa del Parlament que le permita delegar el voto. En el pleno de investidura los encarcelados ya optaron por esta solución.