_
_
_
_
_

Dos detenidos en Perú por la muerte de la joven española desaparecida en Cuzco

Los arrestados afirman que escondieron el cuerpo de Nathaly Salazar Ayala después de que esta sufriera un accidente en una tirolina

Nathaly Salazar Ayala, a la derecha, en una fotografía tomada durante el viaje.

La Policía Nacional del Perú (PNP) ha detenido este sábado a dos personas y desde entonces busca en un río caudaloso de la región Cuzco el cuerpo de la turista joven española de origen ecuatoriano Nathaly Salazar, desaparecida desde el pasado 2 de enero mientras visitaba esta zona del sur del país latinoamericano. Un portavoz policial ha informado de que los arrestados son el dueño y un trabajador de una especie de tirolina, que ofrecía a los turistas una visión panorámica del Valle Sagrado de los Incas. Ambos sostienen que murió de forma accidental y que ocultaron el cadáver por miedo.

Más información
La policía rastrea Cuzco y otros lugares turísticos en busca de la turista española desaparecida en Perú
La hermana de la turista española desaparecida en Perú: “Hace ya seis días y nadie tiene ni una pista”
Desaparecida una joven turista española en Perú

Los sospechosos son Jainor Huila Huamán, de 19 años, y Luzgardo Pillcopata Amaru, de 21, que arrestados el sábado en el distrito de Maras, cerca de Cuzco y al sitio que Salazar dijo que iba a visitar el 1 de enero, cuando se comunicó por última vez con su familia en España, según ha informado el Departamento de Investigación Criminal de la Policía de Cuzco y recoge el diario peruano El Comercio en su edición digital. Los investigadores localizaron un vehículo con matrícula V1H-337 que buscaban desde el momento de la desaparición. En él estaba Huillca Huamán, quien no opuso resistencia.

El sospechoso, "al saber sobre las consecuencias que acarrearía el faltar a la verdad u ocultar información" aceptó su implicación "de forma accidental" junto a Pillco Amau en la muerte de Salazar Ayala, según un portavoz policial. Los detenidos han asegurado que la joven murió en el acto al golpearse cuando practicaba el deporte de aventura Zip Lineal, una mezcla de tirolina y teleférico que consiste en tirarse en una canastilla sostenida con cables elevados. Ambos tomaron la determinación de ocultar su cadáver por miedo a que no los creyeran y luego decidieron arrojarlo a las aguas del río Vilcanota-Urubamba a la altura de la torre de energía eléctrica Macchupicchu Cachimayo entre las 18.30 y las 19.00 de ese 2 de enero.

El testimonio de una familia que estuvo con Nathaly en la tirolina ha sido clave para esclarecer la desaparición. Había llovido mucho y una pareja con dos hijos pequeños se había quedado atrapada en la instalaciones de Zip Lineal. Como ella tenía experiencia en deportes de aventura, se ofreció para ayudar a los dos guías a evacuar a la familia. Nathaly se deslizó con el transporte rústico, pero uno de los jóvenes detenidos utilizó también la tirolina y aplastó a la chica, según fuentes policiales. Este hombre aún tenía lesiones en la cara y un brazo dislocado como consecuencia del choque.

Según la información policial, el 2 de enero la joven llegó al sitio arqueológico de Moray y de ahí se dirigió a Maras, para luego seguir a pie hasta la comunidad campesina de Cacllaracay, donde se ofrecía el servicio de observación a los turistas. El Valle Sagrado de los Incas se extiende a lo largo del río Vilcanota-Urubamba, al noreste de la ciudad de Cuzco, y es una zona campestre que gusta a los turistas debido a su menor altitud y a un clima más cálido que la urbe.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Tras conocer el testimonio de los detenidos, los agentes de la Divincri, que van acompañados por dos miembros de la Guardia Civil española destinados en Cuzco para investigar el caso, continúan con la búsqueda del cuerpo con autorización del ministerio público. Salazar, que llevaba dos meses y medio viajando por Latinoamérica, salió el 2 de enero a las siete de la mañana del hostal vestida con leggins negros, chaqueta rosa y calzado de montaña con un bolso tras cambiar dinero en el hotel y preguntarle al guarda del establecimiento cómo llegar a las ruinas arqueológicas.

Los padres de Salazar llegaron a Perú el pasado martes, con la intención de sumarse a la búsqueda que se hace en e Cuzco y, según indicó su madre, Alejandra Ayala, el 31 de diciembre pasado fue la última vez que tuvo comunicación con ella, quien le aseguró que estaba "bien y feliz". Además, precisó que su hija tenía planeado seguir conociendo otras ciudades del país después de visitar Cuzco. 

Salazar, de 28 años, llegó a Valencia con sus padres y su hermana cuando tenía 11 años desde Ecuador y tiene nacionalidad española. Estudió Actividad Física y del Deporte y trabajó en un puesto del Mercado Central de Valencia hasta que hace dos meses y medio viajó a Quito, donde comenzó a cumplir su viejo sueño de recorrer Latinoamérica como mochilera.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_