Rajoy desmiente la acusación de Rovira: “Es una vergüenza intolerable”
El presidente confirma que ha dado la batalla hasta el final para lograr la sede de la Agencia Europea de Medicamentos para Barcelona
Indignación y malestar. El Gobierno de Mariano Rajoy reaccionó con sorpresa y enfado este viernes ante el nivel de la acusación lanzada por la secretaria general de ERC, Marta Rovira, quien aseguró en una entrevista en RAC 1 que el ejecutivo central había llegado a amenazar por "múltiples vías" con enviar al Ejército y con "muertos en las calles" si el Govern catalán mantenía sus planes de la declaración unilateral de independencia (DUI). El presidente, al finalizar una cumbre informal sobre empleo en Suecia, desmintió tajantemente esa posibilidad como una "enorme mentira", calificó esas manifestaciones como una "vergüenza" y abogó porque en la disputa política no valga todo.
Terminada la cumbre social de Gotemburgo, donde la UE estudió nuevas ideas sobre el acceso al empleo y las oportunidades para los jóvenes europeos, los líderes dejaron el foro informal y emprendieron retorno a sus países de origen. Rajoy se paró unos minutos para explicar algo el desarrollo de la sesión y para salir al paso de las últimas acusaciones de la dirigente de ERC. Cuando se le preguntó directamente sobre las declaraciones de Rovira, el presidente del ejecutivo se mostró contrariado y afirmó: "Eso es una vergúenza, ya no hay calificativo que tenga yo para aplicar a esa afirmación. Dejémoslo en que es absolutamente falso, es una enorme mentira y sobre todo es una vergúenza y creo que en la vida no vale todo. Cada uno puede defender sus posiciones como quiera pero esto es intolerable".
Rajoy aclaró, además y sobre la reunión bilateral que mantuvo en la mañana de este viernes en Gotemburgo con el primer ministro belga, Charles Michel, que daba por zanjada cualquier diferencia de criterio con su Gabinete sobre el asunto del refugio de Carles Puigdemont en Bruselas porque entre otras razones habían decidido no abordar ese tema al corresponder su solución a las autoridades judiciales de ambos países, que ambos consideran independientes en este proceso. "Las relaciones bilaterales están magníficas, y eso es muy positivo y los jueces tienen que hacer su trabajo y los ejecutivos el suyo", concluyó Rajoy.
Sobre la orden de extradición demandada sobre Puigdemont a la Justicia de Bélgica, el líder español expresó su confianza en el poder judicial, belga y español, y remachó que la independencia de los jueces y la división de poderes "es uno de los valores básicos y principios fundamentales de la Unión Europea, y como empezemos a poner en tela de juicio eso me parece que no vamos por buen camino y por tanto a mí no me oiran más que respeto y acatamiento a las decisiones de los tribunales de justicia, sean las que sean".
El presidente español añadió, sobre las posibilidades de que Barcelona acoja finalmente la sede de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), que se decide este próximo lunes, que había "dado la batalla" hasta el final y glosó las virtudes de esa candidatura: "Barcelona es una gran ciudad, allí hay una industria del medicamento muy importante y creo que razones técnicas hay todas para que Barcelona gane esa batalla, y luego ya veremos".
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