El Gobierno elige a un coordinador para el 21-D
El Consejo de Ministros ha nombrado este viernes a Juan Antonio Puigserver como coordinador de la organización de las elecciones catalanas del 21 de diciembre
El Consejo de Ministros ha nombrado este viernes al secretario general técnico del Ministerio del Interior, Juan Antonio Puigserver, como coordinador de la organización de las elecciones autonómicas que se celebrarán en Cataluña el 21 de diciembre. Tras la activación del artículo 155, el Ejecutivo ha asumido la gestión de los comicios, que movilizarán a cinco millones de votantes y costarán 25 millones. El Gobierno ha modificado el Presupuesto de la Generalitat para hacer frente a esos gastos.
Tras el decreto validado este viernes, Puigserver asume funciones correspondientes a la Secretaría general del departamento de Interior de la Generalitat y al Área de Procesos Electorales de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda. Este alto cargo, natural de Palma y abogado del Estado, ya era miembro de la Junta de Seguridad de Cataluña, ha desarrollado la mayor parte de su carrera en esta Autonomía y habla catalán. Su designación servirá para centralizar la organización de unos comicios con los que el Ejecutivo espera restaurar el orden constitucional en la Autonomía.
"Estas elecciones tienen que ser el punto final para comenzar un proceso de estabilidad, de seguridad y de recuperación", explicó el portavoz gubernamental, Íñigo Méndez de Vigo. "En cuanto a quién puede formar parte de las listas electorales, de acuerdo con nuestra legislación, mientras no exista una condena firme que lleve aparejada la inhabilitación, todo el mundo está en posesión de sus derechos civiles y políticos", añadió en referencia a Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y el resto de exconsejeros del Govern destituido, que han sido acusados por la fiscalía de sedición, rebelión y malversación.
El coste de organizar las elecciones será de 25 millones, que se dividirán en dos plazos: 17,3 en 2017 y 7,8 en 2018. La Generalitat subvencionará con 16.101,60 euros cada escaño y con 0,61 euros cada voto conseguido por las candidaturas que hayan logrado al menos un representante.
Los resultados serán decididos por los 5.553.983 catalanes con derecho a voto. Ese censo es ligeramente mayor al que manejaron los independentistas para el referéndum ilegal del 1 de octubre (5.343.358 personas). Además, 136.300 jóvenes podrán participar por primera vez en las autonómicas catalanas, al haber alcanzado la mayoría de edad después de las celebradas en 2015.
"Cataluña ha estado sometida a muchos procesos electorales en los últimos tiempos", recordó ayer Méndez de Vigo. "Ha habido elecciones autonómicas en el año 2010, en 2012 y en 2015", enumeró. "Ha habido generales en el 2011, el 2015 y el 2016. Locales en 2015. Europeas en 2014", siguió. "Y hubo dos consultas ilegales en 2014 y en 2017. Por tanto, estas elecciones deben servir para dar estabilidad y evitar las consecuencias económicas tan perjudiciales que estamos viendo en esta Comunidad Autónoma".
En las autonómicas de 2015 se impuso la coalición de Junts pel Si. El 27-S supuso también el despegue de Ciudadanos, que sumó 25 diputados. Ahora, el promedio de sondeos coloca primero a ERC, seguido de Ciudadanos y del PSC. Los independentistas rondan el 45% de votos, dos puntos por debajo de su resultado en 2015.
