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Santamaría advierte de que los gastos de la consulta los pagarán los convocantes

La vicepresidenta alerta ante una estrategia de tensión para provocar al Estado y movilizar el voto independentista ante las próximas elecciones. Puigdemont le reprocha su visión sobre Cataluña y le espeta que "no se entera de nada"

Javier Casqueiro
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en una imagen de archivo.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en una imagen de archivo.Ballesteros (EFE)
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El Gobierno está alerta ante esta nueva fase que se ha desatado en el proceso independentista en Cataluña y avisa, además, de que "hay que prepararse para una estrategia de tensión". La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, pronosticó este lunes en Los Desayunos de RTVE que esa "estrategia de tensión" tiene fines movilizadores en clave electoral y "busca provocar la reacción del Estado". La número dos del Ejecutivo central aseguró, además, que el Gobierno no está parado esperando a ver qué sucede, recalcó que ya se han tomado medidas para que el referéndum separatista no se celebre y advirtió de que los gastos que se hagan en los preparativos de esa consulta "no van a salir de los catalanes sino que se van a sufragar por los responsables" de que se convoque esa cita.

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Soraya Sáenz de Santamaría sostuvo así que el Gobierno catalán ha entrado en esta fase de "mucho postureo y actos de naturaleza mediática" y de tensión "para aglutinar a los socios y provocar al Estado" con un fin movilizador del voto independentista, que considera a la baja. Y volvió a ratificar en su respuesta que no se va a caer en esa trampa pero también que el referéndum ilegal no se va a celebrar: "El Estado sin una palabra más alta que otra no va a permitir que se celebre ese referéndum".

La número dos del Ejecutivo de Rajoy interpretó que este "discurso indepe", como lo califican coloquialmente muchos nacionalistas catalanes, persigue ahora crear un "clima preelectoral y de campaña para movilizar el voto independentista para las elecciones". Y vaticinó que la esperanza del Gobierno se fija en que tras el resultado de esos comicios autonómicos el panorama se aclare un poco y haya una mayoría no separatista más nítida que permita "abrir una senda de diálogo racional con el nuevo Gobierno catalán como ya se ha hecho en otras zonas de España", en alusión a los pactos alcanzados con el PNV en Euskadi que tantos frutos ha reportado para esa autonomía en los recientes presupuestos generales del Estado.

La vicepresidenta se fijó así en esa mayoría que cuantificó en un 60% "que no son independentistas y que son ninguneados y oscurecidos por la Generalitat" y a la que observa ya muy cansada de todo este proceso.

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En el equipo de Mariano Rajoy argumentan que en estos últimos meses no han estado quietos observando lo que se programaba desde la Generalitat en Cataluña y sostienen que su táctica de a cada acción una reacción ha funcionado. La vicepresidenta afirmó así que "ya hay medidas adoptadas que impiden la celebración de ese referéndum" y ahí catalogó desde la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado febrero en la que se advertía que todos los actos preparatorios del referéndum tampoco se podrían organizar y serían recurribles, o la querella presentada por la fiscalía en mayo contra la consellera de Gobernación, Meritxell Borrás y contra el secretario general de Gobernación Francesc Esteve, por los delitos de prevaricación, desobediencia y malversación por la licitación de las urnas.

En esa línea de contraataque, la vicepresidenta recordó que ya hay cuatro consejeros catalanes inhabilitados, que se ha trasladado el mensaje a los funcionarios para que no se sometan a ninguna presión ilegal para que firmen concursos relacionados con el referéndum y destacó mucho la actuación del Tribunal de Cuentas en la que se apunta a que los gastos efectuados hasta ahora relacionados con la consulta, cuantificados en unos cinco millones de euros, deberían ser pagados por esos consejeros expedientados. Santamaría recalcó en ese sentido que a partir de ahora todos los gastos que se hagan para la hipotética nueva consulta "no van a salir de los catalanes sino que se van a sufragar por los responsables" que firmen esos contratos.

El Gobierno maneja la percepción también de que la sociedad catalana "está hastiada" de este largo y conflictivo proceso. La vicepresidenta llegó a comentar este lunes: "Ya está bien de este rollo". Y se dirigió especialmente a ese porcentaje, por ahora mayoritario según los índices de voto y lo que reflejan las encuestas, de catalanes que no se declaran independentistas ni a favor del referéndum de autodeterminación. Santamaría consideró así "bochornoso" el comportamiento y el trato que reciben esos catalanes no separatistas por parte del Gobierno de la Generalitat y sus partidos que parecen ser los único que expiden "carnés de verdaderos demócratas".

"Santamaría no se entera de nada"

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, rechazó el análisis hecho por Santamaría sobre la situación que se vive en Cataluña y le espetó que "no se entera de nada". "¿A qué se ha dedicado esta señora? ¿Cómo es capaz de decir tantas inexactitudes y tergiversaciones en tan poco rato alguien que tiene encomendada la misión de interesarse por lo que pasa en Cataluña?", lanzó el presidente catalán en una entrevista a Rac1. Sobre la afirmación de la vicepresidenta de que en Cataluña no se da voz a los independentistas, Puigdemont le contestó que, justo en ese momento, la televisión pública catalana entrevistaba al delegado del Gobierno en Cataluña Enric Millo, informa Ivanna Vallespín.

Puigdemont también respondió a la acusación de que el Gobierno catalán prepara una "estrategia de tensión". "A mí, me tensionan otras cosas, como que la Mesa deba responder ante la justicia por permitir un debate democrático", remachó.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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