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Un imputado en Púnica insiste en incorporar al sumario sus contactos con el CNI

Alejandro de Pedro, experto informático de la trama, quiere utilizar como prueba a su favor los 37 mensajes y conversaciones telefónicas que mantuvo con el servicio de inteligencia

Óscar López-Fonseca
Alejandro de Pedro, empresario imputado en la trama Púnica.
Alejandro de Pedro, empresario imputado en la trama Púnica.Luis Sevillanos

Alejandro de Pedro, uno de los principales imputados en el caso Púnica, ha remitido al titular del Juzgado Central de Instrucción 6, Eloy Velasco, un escrito en el que insiste en reclamar que se incorporen a la causa el contenido de los 25 mensajes SMS y 12 llamadas de teléfono que intercambió con integrantes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) hasta pocos días antes de su detención en octubre de 2014. Fuentes de la defensa del experto informático asegura que con ellos el experto informático pretende demostrar que buena parte de los 80.000 euros en efectivo que se le intervinieron en su casa cuando fue arrestado procedían de los trabajos que realizó para dicho organismo de inteligencia. Estas mismas fuentes añaden que su labor para el CNI consistía en difundir mensajes positivos de España y su Gobierno en foros yihadistas e independentistas en Internet, además de detectar radicales en las redes sociales y controlar sus movimientos. El magistrado no ha respondido a dicha petición.

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El escrito, fechado el pasado el pasado 28 de abril, detalla que dichas comunicaciones fueron interceptadas durante la investigación del caso Púnica por la Guardia Civil, pese a lo cual no se han incorporado a las piezas en las que está encausado De Pedro. En esta ocasión, en concreto, reclama que se sumen a la documentación que obra en la llamada pieza de León, en la que se investigan las presuntas irregularidades en los trabajos de reputación on line que hizo para los que fueran máximos responsables de la Diputación provincial, la asesinada Isabel Carrasco y el también dirigente del PP Marcos Martínez Barazón. En esta pieza, el experto informático está acusado de cinco delitos. También figuran como procesados otras cuatro personas, entre ellas Martínez Barazón y el alcalde popular de Puebla de Lillo, Pedro Vicente Sánchez.

Esta es la tercera vez que el experto informático pide que se incorporen estas comunicaciones a la causa. Ya lo hizo el pasado verano, aunque entonces su petición no fue aceptada porque no identificó quiénes eran sus interlocutores. Lo volvió a pedir en diciembre, indicando entonces que se trataba de contactos con integrantes del servicio secreto, pero aún no ha obtenido respuesta del juez. Ahora lo ha vuelto a pedir. Los supuestos contactos con el CNI se desarrollan entre el 1 de julio de 2014, el día en el que se inició la intervención de su teléfono por orden judicial, y el 8 de octubre de ese mismo año, poco más de dos semanas antes de que fuera detenido.

Fuentes cercanas a la defensa de De Pedro consultadas insisten en la importancia de estas llamadas para demostrar que los trabajos que hizo para mejorar la imagen en Internet de destacados políticos y cargos públicos de Madrid, Valencia, Murcia y León eran absolutamente legales y que, de hecho, y su "alta profesionalidad" llevó al CNI a reclamar sus servicios. Siempre según estas fuentes, los servicios de inteligencia españoles le contrataron para realizar trabajos de contranarrativas en las redes sociales a los mensajes lanzados contra España por diversos colectivos radicales, entre ellos yihadistas e independentistas catalanes y vascos. El experto informático ha declinado detallar el contenido exacto de los mismos.

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Sobre la firma

Óscar López-Fonseca
Redactor especializado en temas del Ministerio del Interior y Tribunales. En sus ratos libres escribe en El Viajero y en Gastro. Llegó a EL PAÍS en marzo de 2017 tras una trayectoria profesional de más de 30 años en Ya, OTR/Press, Época, El Confidencial, Público y Vozpópuli. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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