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Castilla-La Mancha prohíbe las tarjetas de crédito públicas

El Ejecutivo analiza si los gastos del exdirector de la televisión autonómica son delito

El director general de Radio Televisión Castilla-La Mancha, Ignacio Villa.
El director general de Radio Televisión Castilla-La Mancha, Ignacio Villa.I. Herrero (EFE)

El Gobierno de Castilla-La Mancha, del PSOE con apoyo de Podemos, ha prohibido el uso de tarjetas de crédito o débito de cuentas de titularidad pública y ha desactivado las dos que posee la sociedad autonómica para el desarrollo industrial, Sodicaman. La medida se ha adoptado después de que el Ejecutivo haya detectado que Ignacio Villa, director del ente público de televisión durante el mandato de María Dolores de Cospedal, del PP, gastó 133.818 euros en cuatro años con dos visas del ente en hoteles y restaurantes de lujo, tiendas y supermercados. El equipo de Emiliano García-Page estudia si los gastos de Villa suponen delito.

El portavoz del Gobierno regional, Nacho Hernando, ha detallado este miércoles que las tarjetas de la televisión castellana registran, además, 33 retiradas de 2.570 euros de cajeros automáticos. Hernando ha destacado que este uso de dinero público lo ha realizado un alto cargo que “tenía un sueldo de 120.000 euros”, era responsable de un ente con ocho millones de deuda y durante un gobierno popular que tenía la “austeridad y los recortes por bandera".

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Los gastos de Villa ascienden a una media de 2.852 euros mensuales, incluyen todos los meses del año y 32.954 euros en fines de semana. La Junta va a verificar todos estos cargos y las justificaciones que el exdirectivo ha afirmado tener.

No obstante, para evitar que vuelvan a producirse hechos similares, el Gobierno de García-Page ha encargado al consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, que elabore un proyecto para prohibir por ley la utilización de tarjetas con cargo a cuentas públicas y que esta medida solo pueda ser modificada por las Cortes.

Además de gastos en restaurantes y hoteles de lujo, la tarjeta pública que utilizó Villa cuenta con recibos de Leroy Merlin, Ikea, la relojería Ruiz Maeso y en los supermercados Eroski, Mercadona y Sánchez Romero. Ignacio Villa afirmó que los gastos eran “de empresa”, contenidos y registrados.

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