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Pugna abierta en PP balear por el ‘número uno’ de las generales

El exalcalde Mateo Isern y su excolaborador Álvaro Gijón se enfrentan por liderar la lista

José Ramón Bauzá junto al alcalde de Palma Mateu Isern (izq), en una imagen de archivo.
José Ramón Bauzá junto al alcalde de Palma Mateu Isern (izq), en una imagen de archivo.M. T. DIEZ (EFE)

El Partido Popular (PP) de Baleares se halla huérfano de poder y de liderazgo tras la debacle en las elecciones locales y autonómicas del pasado 24 de mayo. Las distintas familias internas pugnan públicamente por situarse en la cabecera de la lista de Baleares al Congreso de los Diputados, en las generales del 20 de diciembre. En la carrera electoral se enfrentan el exalcalde de Palma Mateo Isern, con intenciones renovadoras, y quien fue su segundo, Álvaro Gijón, apoyado por el antiguo aparato político de Palma.

Es una disputa previa de cara al futuro congreso regional del partido, en el que se ha de elegir al nuevo presidente del PP balear, tras la caída electoral y renuncia de José Ramón Bauzá. Los precandidatos medirán sus apoyos entre los 166 miembros de la Junta Insular de Mallorca, que se celebrará el miércoles. Mallorca, por su peso demográfico, encabeza la lista y domina la estructura interinsular ante Ibiza, Menorca y Formentera.

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No ha sido posible hasta ahora alcanzar un pacto entre las familias populares para evitar las votaciones, pese a los intentos del presidente regional provisional, Miquel Vidal. Los grupos no quieren el consenso; quieren concretar su peso en la estructura del partido. No hay primarias abiertas entre los militantes que, sin embargo, sí votan uno a uno en los congresos internos.

El exalcalde Mateo Isern fue víctima de un veto en las pasadas elecciones locales por parte de José Ramón Bauzá y de quien maneja el aparato del PP, el histórico ex secretario general José María Rodríguez, imputado en una causa por corrupción. Mientras, Álvaro Gijón, diputado balear y concejal de Palma, aparece como el delfín de Rodríguez.

Estilos distintos

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Isern y Gijón, ahora enfrentados, representan dos estilos distintos en la manera de hacer política del PP, el partido que gobernó en Baleares de manera hegemónica durante tres décadas, con los paréntesis de los dos pactos de la izquierda anteriores. Bauzá, al perder la presidencia del Gobierno de Baleares, dejó la dirección del partido y pidió ser elegido senador por el Parlamento balear. Desde el ostracismo, el expresidente no es favorable a la candidatura de Isern, con quien se enfrentó.

El ex primer edil explica que batalla internamente contra una realidad complicada. Quiere "ser capaz de volver a aglutinar detrás del PP a toda esta gente que durante estos últimos enfrentamientos electorales han ido perdiendo".

Al lado de Isern concurre para el Senado Miguel Ramis, que ha sido alcalde, consejero, delegado del Gobierno y diputado en Madrid; un profesional de la política con distintos presidentes autonómicos desde los años noventa, de Gabriel Cañellas a Jaume Matas.

Por su parte, el precandidato Álvaro Gijón vindica su papel entre continuidad y renovación generacional —es más joven que Isern— y, desafiante, asegura que su rival "sería un buen número cuatro" de su propia candidatura.

Un total de nueve personas, militantes en el anonimato y excargos públicos y electos quieren encabezar la lista del PP de Baleares al Congreso de los Diputados y otras once pugnan por la nominación unipersonal para el Senado.

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