El ministro de Justicia defiende la prohibición de grabar a los detenidos

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha negado que las reformas legales en trámite que impulsa el Gobierno para evitar que los detenidos puedan ser grabados o fotografiados sea "un ataque a la libertad de expresión". Lo ha manifestado durante la clausura del congreso de la Unión Progresista de Fiscales (UPF), este sábado en Palma. En la sala se han oído murmullos entre los 100 fiscales asistentes. Catalá ha recalcado a continuación que la corrupción no afecta solo a la clase política, sino a otros ámbitos y sectores "como se ha visto". Al final, la sala le ha aplaudido.

Catalá, antes de su intervención en el pleno del congreso de la UPF, ha emplazado al PSOE a que no cierre las puertas a posibles acuerdos con el PP y Ciudadanos. El ministro se ha extrañado que el PSOE de Pedro Sánchez rechace alianzas hacia el centro derecha, como las que cierran con normalidad los socialistas en Europa. Catalá ha subrayado que la concreción de pactos que excluyan al PP pueden poner en riesgo inversiones previstas, aunque no ha aclarado qué proyectos corren peligro de ser anulados.

La fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, que también ha participado en el congreso, ha mostrado en público su respaldo al fiscal Pedro Horrach en su labor en el caso Nóos. En concreto, ha apoyado su posición sobre la no imputación de la infanta.

Madrigal no se ha cerrado en banda a que existan los pactos de conformidad, con reparación del daño y asunción del delito, según los protocolos establecidos en la fiscalía general. La fiscal ha sido cauta acerca del recorrido penal del caso de la pitada al himno español en la final de la Copa del Rey, entre el Barça y el Athletic de Bilbao. Ha sostenido que está a la espera de los informes que se han de emitir aunque, personalmente, ha asumido que la bandera y el himno podrían haber sido ultrajados. "Depende de las identificaciones", ha añadido.