_
_
_
_
_

Los barones secundan el relevo de Gómez, pero dudan del procedimiento

La intervención en Madrid puede mejorar las perspectivas en Andalucía y Valencia

Anabel Díez
Tomás Gómez, tras su destitución.
Tomás Gómez, tras su destitución.Ballesteros (EFE)

Aceptación, acatamiento, “por supuesto”, y coincidencia en los motivos esgrimidos por la Ejecutiva Federal para suspender de sus funciones al secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, a su Ejecutiva y al resto de los órganos de control madrileños. Desde hace meses los secretarios territoriales del PSOE han intercambiado puntos de vista sobre su situación electoral ante las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24 de mayo y, entre todos, había coincidencia en la preocupación que despertaba Madrid, por su relevancia. No obstante, la preocupación fue la primera impresión que daban los barones territoriales socialistas, todos ellos concernidos

No obstante, la fórmula de suspensión elegida por Pedro Sánchez, secretario general, les ha sorprendido y algunos expresan alguna duda sobre si este es el mejor método. Pero, en principio, nadie lo cuestionará en voz alta. La mayoría expresó este miércoles su apoyo a la decisión y otros, como el caso de Andalucía, han preferido callar con el argumento de que “no tienen la información suficiente”. El secretario general del PSOE tenía previstas estas reacciones porque habló personalmente con muchos de ellos; con otros lo hizo el secretario de Organización, César Luena.

El presidente asturiano, Javier Fernández, señaló su “total confianza en las decisiones que adopte la dirección federal”, como señaló a EL PAÍS y como lo hizo ante el propio Sánchez.

Más información
Un escándalo que destapó EL PAÍS
Perfil | Tomás Gómez, el líder que redujo el socialismo madrileño al mínimo
La destitución de Gómez sitúa al PSOE en primer lugar y desplaza a Podemos
La dirección federal ve en Gabilondo un candidato ganador
El desafío de Gómez, sin visos de prosperar en los tribunales

Otro tanto expresó el secretario general de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández-Vara: “Las decisiones de la Ejecutiva Federal se aceptan porque tiene competencias y atribuciones para dirigir todo el partido”. Ese acatamiento formal lo siguió también el candidato a la presidencia de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. “En tiempos de turbulencias no hay que poner dificultades al capitán”, apuntó el castellanomanchego, en referencia a Pedro Sánchez.

El candidato aragonés, Javier Lamban, participó de la misma corriente de respeto y cumplimiento de los dictados de la dirección federal, o de Madrid. Este, como la mayoría, no entró en público en la cuestión de fondo, como tampoco lo hizo el candidato de los socialistas valencianos, Ximo Puig, que conoció por Pedro Sánchez la decisión que iba a comunicar de inmediato. “No voy a estar en contra de una decisión del secretario general”, señaló Puig. Los socialistas andaluces no apuntaron en ninguna dirección con el argumento de que no tenían información.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

¿Puede haber entusiasmo o aplauso en una medida como esta? La respuesta siempre va a ser no, aseguraron distintos barones territoriales al tomar conciencia de que a cualquier de ellos le puede pasar algo así, ya que la dirección federal tiene facultades estatutarias para disolver y suspender agrupaciones y federaciones.

Ante la pregunta de qué otra fórmula podría haberse tomado, los barones no dieron una respuesta clara, salvo la de invocar “el diálogo” entre la dirección de Madrid y las federaciones. “En Madrid la situación electoral era de susto o muerte, pero aún así es muy traumático”, señala un dirigente territorial. En la próxima reunión de la Ejecutiva Federal se expresarán algunos de estos resquemores, como en la permanente —Ejecutiva reducida— los invocó Carme Chacón.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_