2001. Los papeles reflejan ayudas a víctimas de ETA

2001 es el primer año completo del segundo mandato de José María Aznar. Los papeles de Bárcenas recogen muy escasas donaciones empresariales (20 millones de pesetas). El terrorismo de ETA vuelve a convertirse en el mayor problema que sufre España (tras la tregua de 1999, los terroristas han vuelto a matar y eligen como objetivos a dirigentes del Partido Popular). De esa trágica realidad queda constancia en estos registros contables de Bárcenas. El PP dedica algunas cantidades de dinero de la caja que maneja Bárcenas a ayudar a sus víctimas del terrorismo, como la viuda del concejal popular Francisco Cano, asesinado por ETA unos meses antes en Viladecavalls (Barcelona), tras colocar una bomba bajo su vehículo. El entonces gerente del partido apunta en su contabilidad 18.000 euros de ayuda a la viuda.

Pío García Escudero, hoy presidente del Senado y persona de confianza de José María Aznar, con el que trabajó en Castilla y León, vive en Madrid junto al lugar donde ETA atenta con otro coche bomba en el verano de 2000, en la calle Platerías. Los arreglos de su vivienda, que ha sufrido graves desperfectos, le cuestan cinco millones de pesetas que pidió prestados al partido. Javier Arenas, secretario general, acepta adelantar ese dinero. En la contabilidad de Bárcenas, se consigna el primer pago para saldar esa deuda: “Pío García Escudero (devol. Antic. Atentado) 1.000.000”.

Álvaro Lapuerta, tesorero del partido, se ocupa de atender algunas necesidades relacionadas con otros amenazados de ETA que pertenecen al partido. Jaime Ignacio del Burgo aparece con un apunte de 500.000 pesetas. La contabilidad que supervisa el gerente Luis Bárcenas sirve para ayudas a víctimas del terrorismo.