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El precedente de las consultas de Ibarretxe

El Tribunal Constitucional anuló el intento vasco de convocar un referéndum

María Fabra

La idea lanzada por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, para la convocatoria de una consulta popular soberanista en Cataluña tiene su precedente más claro en el intento del lehendakariJuan José Ibarretxe de celebrar un referéndum que abordaba la independencia del País vasco. De hecho, el propio Ibarretxe ha reclamado el "derecho a decidir" para el pueblo catalán y vasco en un vídeo que ha enviado a la Assemblea Nacional Catalana (ANC), en el que añade que pedir la posibilidad de que Catalunya y Euskadi decidan sobre su independencia no es "defender un principio del nacionalismo vasco o el catalán, es simplemente defender la democracia".

La apuesta de Ibarretxe fue liquidada por el Tribunal Constitucional que consideró violado el artículo 149.1.32 de la Constitución, que reserva al Estado la competencia exclusiva para autorizar la convocatoria de consultas populares mediante referéndum. Aquella consulta no pretendía iniciar el proceso independentista sino tomarle el pulso ya que la pregunta a responder se limitaba a preguntar sobre la posibilidad de someter la cuestión a otro referéndum. “¿Está usted de acuerdo en que los partidos vascos, sin exclusiones, inicien un proceso de negociación para alcanzar un acuerdo democrático sobre el ejercicio del derecho a decidir del pueblo vasco y, que dicho acuerdo sea sometido a referéndum antes de que finalice el año 2010?”.

La iniciativa del entonces lehendakari había tenido un amplio recorrido, con la aprobación de una Ley de Consulta vasca, aprobada por la mayoría del parlamento autonómico, algo que Cataluña aún no ha puesto en marcha. En cualquier caso, el Constitucional marcó los errores en el camino vasco ya que, aunque la Constitución prevé la existencia de convocatorias de referendos en ámbitos territoriales inferiores al nacional, la ley vasca intentó sacarlo adelante "sin apoyo de un título competencial expreso" y sustituyendo la preceptiva autorización del Estado por la dispensada por el Parlamento Vasco. "En un sistema como el español, cuya regla general es la democracia representativa, sólo pueden convocarse y celebrarse los referendos que expresamente estén previstos en las normas del Estado, incluidos los Estatutos de Autonomía, de conformidad con la Constitución", subrayó el Constitucional. En esa autorización es en lo que se basó el recurso del entonces Gobierno socialista.

Ahora, Artur Mas, en el caso de seguir con la idea planteada esta mañana, debería solicitar esa autorización al Gobierno del PP, que se ha manifestado tajantemente en contra de la independencia de Cataluña, pero que no ha roto los lazos que en el parlamento catalán le unen a CiU.

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