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Montoro y Rubalcaba se culpan de generar desconfianza en los mercados

Ambos dirigentes han contrapuesto sus modelos económicos y los ritmos para salir de la crisis

Jesús Sérvulo González

En lo único que han coincidido hoy el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el secretario general del PSOE, Alfredo Rubalcaba, en la sesión de debate de Presupuestos en el Congreso ha sido en dibujar un panorama sombrío en la economía española. Ambos se han referido a la brusca caída de las bolsas, el estirón incontrolado de la prima de riesgo y del paro… y a los dos trimestres consecutivos de retroceso económico, lo que confirma la segunda recesión en cinco años. En lo demás, ambos dirigentes han contrapuesto sus modelos económicos y los ritmos para salir de la crisis, pero sobre todo para cumplir con el objetivo de déficit fijado por Bruselas.

La creciente desconfianza de los mercados sobre la capacidad de España para pagar los vencimientos de la deuda ha servido de guión a ambos contendientes, que se han acusado mutuamente de no generar confianza, en el debate sobre la enmienda a la totalidad a los Presupuestos de 2012. “El Gobierno con sus torpezas, con sus vacilaciones ha aumentado la desconfianza. Comenzaron escondiendo los presupuestos por puro interés electoral en un momento delicado para la economía española. Quisieron ocultarlo para ayudar a Arenas. Y lo que han hecho ha sido aumentar la desconfianza”, ha lanzado Rubalcaba.

Montoro, por su parte, ha tratado de aligerarse de la responsabilidad de la situación actual: “Hemos recibido como herencia el déficit público, lo que fue un engaño más, muy grave, que ha perjudicado la imagen de España”. El titular de Hacienda ha recordado que el anterior Gobierno aplazó los Presupuestos porque, a su juicio, quería evitar aprobar las medidas de ajuste. Pero Rubalcaba se ha defendido argumentando que está situación se debió a la brusca caída de los ingresos en el último trimestre del año. Y ha asegurado que el gabinete de Mariano Rajoy conoció los datos puntualmente durante el cambio de Gobierno.

Durante su intervención, Montoro también ha culpado a las comunidades autónomas de la crisis de confianza que vive España en el exterior. “Si hay dudas sobre España es por culpa de las comunidades autónomas”, ha asegurado desde la tribuna. En ese punto ha defendido la necesidad de echar una mano a las regiones más necesitadas. “No se pueden producir quiebras parciales”. Montoro ha señalado que durante la primera quincena de mayo ha convocado un Consejo de Política Fiscal y Financiera donde las comunidades autónoma tendrán que presentar en público sus planes económicos financieros donde explicarán como afrontar su deuda. Para garantizarlo ha indicado: “se vigilará, se penalizará y se intervendrá a las autonomías incumplidoras”. Montoro ha aludido a la situación de Andalucía, gobernada por el PSOE, que ha presentado una deuda impagada con proveedores de más de 2.400 millones de euros. El ministro ha cuestionado la salud económica de la junta de Andalucía aunque ha obviado la situación de otras autonomías como la Valenciana o Castilla La-Mancha, que viven incluso más estrecheces.

En el fondo del debate de Presupuestos se esconde el camino diseñado para alcanzar el complicado objetivo de déficit impuesto por Bruseñas en el 5,3% del PIB, frente al 8,5% logrado este año. Lo que obliga a un esfuerzo titánico de consolidación fiscal. En ese punto, el ministro ha anunciado que el avance de liquidación presupuestaria del primer trimestre del año revela que España va por buen camino para lograr ese objetivo. Aunque como ha recordado el jefe del principal partido de la oposición el dato es estacional como revela que en el mismo periodo del año anterior, España también cumplía el objetivo marcado.

Montoro ha justificado que “no es verdad” que los Presupuestos sean insuficientes para cumplir el déficit o que el duro ajuste presupuestario perjudicará la recuperación. Pero Rubalcaba ha sentenciado: “Son unos presupuestos que olvidan el crecimiento. De ajuste puro y duro. Vemos como se discute en todo el mundo el equilibrio entre políticas de ajuste y de crecimiento. El ajuste solo conduce a más ajuste”. Por eso, ha defendido la necesidad de flexibilizar el objetivo de déficit. “Necesitamos flexibilidad para garantizar la consolidación fiscal de nuestra economía”.

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Rubalcaba ha cuestionado con dureza los Presupuestos diseñados por el PP. “Lo peor es que sus presupuestos no se los ha creído nadie. Y la desconfianza en vez de disminuir ha aumentado. Han recortado a diestro y siniestro”, son algunas de las acusaciones de Rubalcaba al Gobierno. También ha señalado que los ingresos de los Presupuestos están sobrevalorados y los gastos infravalorados. “No creo que alcancen 2.500 millones de euros con la amnistía fiscal. Creo que eso lo han utilizado para cuadrar el presupuesto a capón. Es insostenible, es una injusticia es una inmoralidad…imposible de defender. y no hay forma de controlar ese dinero”.

Rubalcaba ha repasado las polémicas reformas del Gobierno en Sanidad y Educación. “Han quitado la asistencia sanitaria a los inmigrantes irregulares que viven en nuestro país. Es xenófobo. Están dando pábulo a una idea de que los inmigrantes usan y abusan la asistencia sanitaria, es xenófobo, es cruel y es ineficaz”. “A la hora de los ahorros en Sanidad tenían dos alternativas: Podían optar por la cuenta corriente de las farmacéuticas o por las pensiones de los pensionistas”. Y ha añadido: “Han quitado la asistencia sanitaria a los inmigrantes irregulares que viven en nuestro país. Es xenófobo. Están dando pábulo a una idea de que los inmigrantes usan y abusan la asistencia sanitaria, es xenófobo, es cruel y es ineficaz, por las urgencias. Han recortado a diestro y siniestro”.

Respecto a los recortes en Educación ha señalado Rubalcaba: “Ya se que no se despiden profesores de la escuela pública, simplemente no se les contrata, es un eufemismo y afecta a la calidad de la enseñanza”. El secretario general del PSOE ha calificado como “dislate educativo y delirio jacobino” la medida del Gobierno de limitar la sustituciones de profesores de baja.

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Sobre la firma

Jesús Sérvulo González
Redactor jefe de Economía y Negocios en EL PAÍS. Estudió Económicas y trabajó cinco años como auditor. Ha cubierto la crisis financiera, contado las consecuencias del pinchazo de la burbuja inmobiliaria, el rescate a España y las reformas de las políticas públicas de la última década. Ha cursado el programa de desarrollo directivo (PDD) del IESE.

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