_
_
_
_
_

Torres-Dulce dice ahora que el 11-M es “caso cerrado” y el fallo,“incontestable”

El fiscal general asegura que Pilar Manjón "tiene las puertas de su despacho abiertas"

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha asegurado esta mañana que la sentencia del 11-M “es incontestable”. Así lo ha indicado a la entrada del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para asistir a la presentación del libro Economía de la Administración de Justicia. Preguntado por los periodistas, el fiscal general ha señalado, respecto a los atentados de los trenes de Atocha, que “hay una verdad jurídica” que es la sentencia. Ha matizado que él no ha ordenado la reapertura del sumario del 11-M, sino que simplemente se ha limitado a poner de manifiesto que se mire si los restos de uno de los vagones aparecidos ya habían sido analizados y valorados por los tribunales.

Más información
Renfe informó en 2007 al tribunal del destino de todos los trenes del 11-M
La Guardia Civil precinta y custodia los restos del tren del 11-M
El fiscal de Madrid rechazó investigar los trenes hace dos meses
El fiscal general reabre el bulo del 11-M que ya rechazaron 14 jueces
La Audiencia archiva el 'bulo' del 11-M contra el jefe de los Tedax
La insidia inacabable del 11-M

También ha añadido que en ningún momento ha indicado que se esté investigando un delito en relación con los restos descubiertos sobre uno de los vagones que estallaron en el atentado del 11-M. Respecto a las declaraciones de Pilar Manjón, presidenta de una de las asociaciones de afectados del 11-M, que pidió a los “conspiranoicos" que dejen en paz a los muertos, el fiscal general ha expresado hoy su “máximo respeto” ante sus declaraciones y comentó que su despacho está abierto para cuando ella quiera entrevistarse con él y hablar sobre este tema.

La insistencia de algunos medios en la teoría de la conspiración ha llevado a las víctimas de los peores atentados cometidos en España a acudir en el octavo aniversario de los ataques divididas. Tras recordar al fiscal general que el caso está juzgado y que hay tres sentencias que así lo confirman, Manjón sostuvo que la decisión emana de "la conspiración repugnante de unos fanáticos que no asumen que los atentados fueron cometidos por yihadistas".

En el parque del Retiro de Madrid, Ángeles Pedraza afirmó que "el 11-M es un caso abierto y ahora más que nunca", al tiempo que ha pedido a todos los que tienen responsabilidades públicas que actúen "con decisión y valentía" para lograr el esclarecimiento total del peor atentado de la historia de España.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La Fiscalía de Madrid ordenó a la Guardia Civil el precinto y custodia de los restos ferroviarios hallados en un almacén del distrito de Villaverde, en Madrid, que podrían corresponder con parte de los trenes que sufrieron los atentados del 11-M y si su hallazgo pudiera suponer "un delito de obstrucción a la Administración de Justicia".

La orden fue dada por el fiscal provincial de Madrid, Eduardo Esteban, una semana después de que el fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, hiciera público que había ordenado investigar la aparición de estos restos, cuyo hallazgo fue conocido por informaciones periodísticas.

Fuentes de la Fiscalía General del Estado confirmaron que el precinto era consecuencia directa de la comunicación realizada por Torres-Dulce a la Fiscalía Provincial de Madrid y descartaron que, por el momento, se hubieran adoptado otras medidas como la recogida de muestras.

Durante un desayuno informativo celebrado el pasado 2 de marzo, Torres-Dulce manifestó que si el hallazgo de los restos se estuviera investigando en un proceso el Ministerio Público archivaría sus diligencias de investigación y actuaría en la causa que ya estuviera abierta. "De no ser así, agotaríamos las diligencias de investigación con el objetivo que estamos precisando y a continuación solicitaríamos la inmediata judicialización", explicó.

El fiscal se mete en un jardín

La declaración del fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, en la que ha subrayado que el 11-M es un caso cerrado, a pesar de que ha ordenado investigar un tren hallado donde siempre se dijo que estaba, merece una lectura atenta. Lo alambicado de sus palabras tiene todas las trazas de lo que coloquialmente se denomina meterse en un jardín para salir de otro. Esta es la transcripción:

"El sumario del 11-M declaró unos hechos probados y esos hechos probados son incontestables; por tanto, ni la Fiscalía General ni nadie va a reabrir el caso del 11-M. Otra cosa es que se produzca algún tipo de denuncia que merece ser investigada, [lo] que no significa en modo alguno reabrir el caso, sino investigar los términos estrictos de esa denuncia y, si los hechos están ya judicializados o no merecen ningún otro tipo de reproche, pues archivarlo; no hay absolutamente nada más. No se trata en modo alguno de reabrir el sumario del 11-M sino de investigar unas afirmaciones inscritas en una denuncia concretamente; no puedo pronunciarme sobre si el hecho es constitutivo de delito. Siempre que se abren unas diligencias de investigación se abren ante la posibilidad de la concurrencia de ese o de otros delitos. Es un poco una apertura ‘in genere’, un poco en términos generales, por tanto no podemos hablar ni siquiera de prescripción ni siquiera de calificación delictiva, sino simplemente de un proceso de preinvestigación para confirmar la existencia o no de esos restos ferroviarios y ver la significación que tienen, post, [en] el proceso concretamente en relación, pero en modo alguno eso supone reabrir, insisto, algo que para el fiscal general del Estado y para cualquier autoridad significa que los hechos están ya probados en superior instancia".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_