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'caso Gürtel'

“¿Que Tomás declara el viernes?”

La conversación de enero de 2009 entre Correa y El Bigotes es un resumen de la trama Gürtel

Una de las grabaciones que ayer, a petición de la fiscalía, se escucharon en el juicio contra Francisco Camps y Ricardo Costa parece, en sí misma, un relato de la trama Gürtel. Por ella desfilan muchos de sus actores y varios de los elementos, entre la presunta corrupción y el sainete, que arman el caso.

La conversación es del 22 de enero de 2009; los interlocutores son Francisco Correa y Álvaro Pérez, El Bigotes. Este acaba de enterarse de que alguien —cree que es Isabel Jordán, miembro de la red— ha contado que regalaba trajes a políticos valencianos. Correa le quita importancia a eso, pero parece temer que de ahí, tirando del hilo, la fiscalía llegue a “más temas” y de más calado.

Pérez y Correa fueron detenidos dos semanas más tarde. Este es un extracto de la conversación.

F. Correa. ¿Qué te pasa?

Á. Pérez. Nada... No te lo voy a contar por teléfono. No tiene nada que ver con la ofi... Tiene que ver con la Jordán, tío.

F. C. ¿Con la Jordán?

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Á. P. Sí, creo que me ha hecho un putadón... gigantesco.

F. C. ¿Con quién?

Á. P. Con Pa... [no termina de nombrarlo, se refiere presuntamente a Paco Camps] Con el curita [apelativo de Camps, según ha reconocido su propio abogado].

F. C. ¿Con Fitur? [la empresa de El Bigotes recibió durante cuatro años la adjudicación del pabellón de Valencia en la feria Fitur].

Á. P. No, no, no... Con otra cosa, tío... más complicada. Pero no hables por teléfono, tío, te lo pido por favor [...].

F. C. ¿Y por qué crees tú que lo sabe el curita?

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Á. P. No, no lo sabe todavía.

F. C. Pero no tiene nada que ver con el trabajo, ¿o sí?

Á. P. No, tiene que ver con cosas que hemos hecho hace tiempo con el curita... Pero es que es muy complicado...

F. C. ¿Tiene que ver con Tomás? [presuntamente José Tomás, director de ventas primero en Milano y después en Forever Young, que hicieron los trajes].

Á. P. Sí, efectivamente. ¿Por qué lo sabes?

F. C. Porque yo me huelo lo único que hay.

Á. P. Llevo todo el día hundido con la mierda esta. Peter me ha dado un par de ideas, pero Ricardo [supuestamente, Ricardo Costa] me dice: “Oye, tío, si lo arreglas así al único que perjudicas es a mí, a tu amigo Ricardo, el único que te ayuda siempre”. Y le digo: “Llevas toda la razón”. Entonces, yo mañana temprano me voy a ver a este personaje amigo mío [José Tomás] y le voy a decir: “Tronco, tú verás lo que haces”.

F. C. Pero... ¿por qué te va a vender si te aprecia un huevo?

Á. P. Pues hombre, sí... Pero declara el viernes...

F. C. ¿¿Que declara el viernes??

Á. P. Sí, declara el viernes. Tiene una citación... Y han llamado a declarar a la cajera de Milano y al director financiero.

[Silencio]

Á. P. ¿Me oyes?

F. C. ¿Que han llamado a declarar...?

Á. P. Sí, porque alguien ha dicho que yo hago regalos a una serie de señores... Entonces, tío, no tengo salida. [...] Pablo [presuntamente Pablo Crespo, mano derecha de Correa y exdirigente del PP gallego] no te lo quiere contar por teléfono.

F. C. ¿Y dónde van a declarar?

Á. P. Al fiscal Anticorrupción.

F. C. ¿Y tú por qué sabes que es la Jordán?

Á. P. ¿Quién va a ser si no? [...]

F. C. Pues los mismos que me están atacando a mí. Eso puede venir por El Albondiguilla [apodo del imputado Arturo González Panero, exalcalde de Boadilla, uno de los municipios madrileños en los que la trama hizo negocio].

Á. P. Hombre, cabe la... A Tomás le han citado y le han dicho que tiene que ver con una empresa que trabaja con el PP.

F. C. Bueno, pues está claro.

F. C. ¿Tomás te va a ayudar?

Á. P. Pues no lo sé, porque como lleva tres meses deprimido [...]. Y su hijo es juez...

F. C. Yo te digo a ti que sí.

Á. P. Yo me voy a verle mañana por la mañana.

F. C. Hombre, claro. Lo que pasa es que habrá más temas, ¿no?

Á. P. No tengo ni puta idea.

F. C. Claro, estará toda la movida de Boadilla, y saldrá el tema mío, el de Pablo, el de todo el mundo. Esto es una denuncia amplia.

F. C. Y Pablo se habrá reunido con Tomás.

Á. P. Sí, ha hablado con él.

F. C. Yo creo que no hay nada que ocultar ahí. Todo se ha hecho perfectamente. Lo único que has hecho es presentar a un amigo.

Á. P. Sí, es lo único que he hecho. Además, yo no le he regalado ningún traje a ese hombre, al curita. Yo he comprado trajes a su medida porque cuando hemos hecho una sesión de fotos se lo ha puesto y luego me lo ha devuelto... [la versión de Camps es que los trajes los pagó él en metálico, no que se los prestaran para ninguna sesión de fotos].

F. C. Que ya lo sé, que no tienes nada que ocultar. Que eso es una gilipollez. Lo que pasa es que eso será el principio de un montón de cosas. [...] El problema no es Tomás. Tomás es uno más. Esto habrá sido una cosa muy amplia. [...] Lo mismo él no conoce los temas de fondo, él no sabe de qué va, qué va a contar él, ya me dirás...

Á. P. Mañana voy a ir a decirle que le he ayudado en todo lo que he podido, que siempre que me ha pedido ayuda le he ayudado.

F. C. De todas maneras tú has cometido un error grave ahora conmigo, un error gravísimo...

Á. P. ¿Ahora?

F. C. Sí. Y a partir de mañana debes tomar medidas. Importantísimas. Estás en el punto de mira, tío.

Á. P. ¿Por qué, por haberte...?

F. C. Es una locura lo que estás haciendo, Álvaro. Estás en el punto de mira. ¿No ves que trabajas para un político importante?

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