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Ana Pastor no garantiza que la ley antitabaco se mantenga igual

Los especialistas dicen que prohibir fumar en bares y restaurantes ha evitado 1.000 muertes

Tabaco
TabacoEUROPA PRESS (EUROPA PRESS)

Francisco Rodríguez, presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT) ha recibido con sorpresa las declaraciones del líder del PP en las que insinúa que suavizará la Ley Antitabaco ya que, en su opinión, se contradicen con la postura que había mantenido el partido hasta ahora. "Todos los parlamentarios apoyaron la iniciativa, incluidos los del PP, por eso salió adelante", recuerda. "Ana Pastor [máxima responsable de Sanidad en el Partido Popular] y Santiago Cervera me aseguraron a principios de la precampaña que no iba a haber ningún paso atrás en la lucha contra el tabaquismo. Hoy, sin embargo [por ayer], Pastor no es capaz de darme ningún tipo de garantía de que se vayan a respetar los espacios libres de humos", dice indignado.

La cabeza de lista del PP al Congreso por la provincia de Pontevedra no ha desmentido esta información a EL PAÍS, pero evita pronunciarse sobre la intención de su partido y no ha asegurado que la norma vaya a mantenerse sin modificaciones.

Un informe de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza refleja que la contaminación del aire en los bares ha descendido de 209,87 mcg/m3 en 2010 a 26,49 mcg/m3 después de la aplicación de la ley

La CNPT defiende que la Ley Antitabaco ya ha demostrado beneficios sanitarios al cumplirse casi un año de su entrada en vigor en su versión más restrictiva (impidiendo fumar en bares, restaurantes y discotecas) como por ejemplo un descenso (aún no cuantificado, puesto que no se ha publicado un Encuesta Nacional de Salud desde 2008) en el número de ingresos hospitalarios por infartos de miocardio y enfermedades respiratorias agudas, sobre todo crisis asmáticas.

"Los ingresos de niños asmáticos han bajado un 15% en el hospital La Paz de Madrid y, en el mismo centro, se espera una reducción de los ingresos por infarto de miocardio (entre 1.400 y 3.000), ya que el corazón se recupera antes que los pulmones del impacto del tabaco", explica Rodrigo Córdoba, vicepresidente del CNPT. "La norma ha dado resultados y la población la ha acogido de buen grado. A excepción de alguna anécdota curiosa, no se ha producido ninguno de los cataclismos que propugnaba el sector de la hostelería", apunta Francisco Rodríguez, presidente del mismo organismo.

Rodríguez recurre a las estadísticas de afiliación a Seguridad Social para desmontar la teoría de los hosteleros de que la norma destruye puestos de empleo. El Ministerio de Trabajo e Inmigración recoge que, el 31 de enero de 2011 -un mes después de la aplicación de la ley-, estaban trabajando en el sector de la hostelería 2.431 empleados más que un año antes. A lo que se suma otro dato: a finales de febrero de 2011 han aumentado la afiliaciones a la Seguridad Social en 21.443 empleados en el sector respecto al mes anterior.

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Acción Ciudadana por la Salud y el Cambio de la Ley de Tabaco recoge en un informe de 2010 que los trabajadores de los locales donde se permitía fumar podían aspirar en una jornada laboral niveles de humo equivalentes a ocho o 10 cigarrillos

Rodríguez advierte de que permitir que el tabaco vuelva a los bares puede tener efectos perniciosos. "Devolveríamos a los trabajadores del sector de la hostelería a una situación de injusticia histórica en la que estaban sometidos al riesgo laboral del tabaquismo pasivo", señala. El presidente de la CNPT se apoya en informes como el que presentó la asociación de Acción Ciudadana por la Salud y el Cambio de la Ley de Tabaco en 2010. El documento recoge que los trabajadores de los locales donde se permitía fumar podían aspirar en una jornada laboral niveles de humo equivalentes a ocho o 10 cigarrillos. Además, la Organización Mundial de la Salud afirma en el informe Mortality attributable to passive smoking in Spain que la regulación del uso del tabaco en la hosteleria ha disminuido su consumo en un 4-5%, lo que supone 1.000 fallecimientos menos al año. "Un millar de muertes evitadas es motivo más que suficiente para mantener la norma como está", señala Rodríguez.

"Eso por no hablar del impacto sobre los jóvenes, a quienes les habíamos enviado un mensaje claro sobre la toxicidad del tabaco al retirarlo de los espacios públicos", añade el presidente de la CNPT. Los fumadores han tomado nota, como explica el vicepresidente de este organismo, Rodrigo Córdoba: "Ha aumentado un 30% el número de ciudadanos que pretenden afrontar la deshabituación tabáquica sin las directrices de los profesionales en comparación al mismo periodo de otros años". A esto ha añadido que la demanda de los que buscan ayuda médica para conseguirlo se ha incrementado entre un 10 y un 20%, con respecto al mismo periodo de años anteriores.

Su denuncia no se limita al ámbito moral sino que además hace referencia a acuerdos internacionales. "Pastor suscribió un convenio marco con la Organización Mundial de la Salud para la lucha contra el tabaquismo que supongo que no podemos saltarnos ahora a la torera por hacer un guiño a cierto sector de la industria", apostilla en referencia a la bajada de ventas en España de las tabacaleras. Las cifras del Comisionado para el Mercado de Tabacos -dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda- señalan que la venta mensual de cigarrillos se ha reducido de los 209,87 millones de cajetillas que se despacharon en 2010 a 199,77 millones, en lo que va de 2011.

Efectos medioambientales

La norma también ha tenido efectos medioambientales. Un estudio del departamento de Medicina y Psiquiatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zaragoza refleja que la contaminación del aire en los bares ha descendido de 209,87 mcg/m3 en 2010 a 26,49 mcg/m3 en 2011, después de la aplicación de la ley, mientras que en los pubs la bajada ha sido de 112,09 mcg/m3 hace un año a 14,09 mcg/m3 actualmente.

Javier Ayesta, presidente de la Sociedad Española de Especialistas en Tabaquismo (SEDET), interpreta las palabras de Rajoy como un "eco nocivo" a nivel mundial. "La Ley Española de 2005 era utilizada por la industria tabaquera como acción preventiva. La proponían a gobiernos del Magreb y Europa Oriental como alternativa a una legislación más dura. Era terrible ser el modelo de las tabacaleras y cuando por fin conseguimos vencerlo, se oye una voz que opta por un paso atrás", protesta.

Esta señala que la nueva Ley Antitabaco española ha sido tomada como referente en países como China, Nigeria y Argentina. "Suavizar la norma sería dar un mal ejemplo porque equivale a reconocer que hemos sido demasiado drásticos y que por eso hemos perdido la batalla". Desde SEDET piden a los políticos que no se olviden de las 3.200 muertes que se producen cada año en España por tabaquismo pasivo, 600.000 en todo el mundo, según datos de la OMS.

Juan José Rodríguez Sendim, presidente de la Organización Médica Colegial, cierra filas junto a los especialistas en tabaquismo. "No creo que Rajoy sea capaz de dar marcha atrás a esta ley si se convierte en presidente. Nadie que conozca los beneficios de la nueva norma puede decir que es preferible volver a la de 2005", concluye.

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