_
_
_
_
_

Matas implica a una eurodiputada para apartar al juez del 'caso Palma Arena'

El expresidente de Baleares quiere que la causa pase al Tribunal Supremo

Jaume Matas, junto a su abogado el pasado 25 de marzo, antes de declarar por el 'caso Palma Arena'.
Jaume Matas, junto a su abogado el pasado 25 de marzo, antes de declarar por el 'caso Palma Arena'.TOLO RAMÓN

El expresidente de Baleares y exministro por el PP, Jaume Matas, persigue una carambola en el caso Palma Arena para forzar la inhibición automática del juez José Castro. Matas intenta implicar a su exmano derecha en el Gobierno, la eurodiputada Rosa Estarás, en una de las piezas donde está imputado en relación a la construcción del velódromo, para que la causa pase al Tribunal Supremo por el aforamiento de Estarás. La defensa de Matas insiste en la implicación de la eurodiputada pero pretende que el juez obre de oficio contra ella.

El magistrado recuerda en un auto que ninguna acusación se ha centrado en las responsabilidades de Estarás e invita al expresidente a “excitar el celo de las acusaciones (de cara a la imputación) aportando la información incriminatoria que estime oportuna”.

El expresidente Matas evitó entrar en la cárcel al abonar una fianza de tres millones de euros que le impuso el juez Castro quien, además, le exigió otra caución de responsabilidad civil de 1,6 millones. Durante meses, Matas y su letrado Antonio Alberca han fracasado en el juzgado y en la Audiencia de Palma en su intento de anular las decisiones del juez y, en especial, de apartar al instructor de la causa acusándole de imparcialidad, fobia política y antipatía personal.

Jaume Matas y su defensor se quejan de que Castro mantenga como testigo –y no como imputada- a la exvicepresidenta Estarás cuando consideran evidente su implicación en la toma de decisiones del Gobierno sobre el velódromo Palma Arena, con su firma en actas ficticias que reflejaban reuniones no celebradas. “La responsable políticamente de ese estado de cosas fue la entonces vicepresidenta” asegura la defensa de Matas. El político se siente agraviado.

En el mes de enero de 2012 Matas se sentará en el banquillo de la Audiencia de Palma, en el primero de los juicios previstos, y se enfrenta una petición de ocho años y medio de cárcel por unos contratos y subvenciones con las empresas del redactor de sus discursos, Antonio Alemany.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_