Barberá insiste en mantener el premio de Fórmula 1 en Valencia

El magnate de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, ya se conocen. “Era muy importante, tremendamente importante que se conocieran”, señaló ayer la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que mantiene el máximo empeño para que la celebración del premio se mantenga en la ciudad y que hoy ha asegurado que se va a cumplir el contrato establecido para la celebración de las pruebas durante los años establecido, hasta 2014.

La reunión entre Ecclestone y Fabra tuvo lugar el pasado sábado. Y fue, según dijo la alcaldesa, “un encuentro privado”, pese a que es dinero público el que la administración valenciana utiliza para pagar el canon anual por este evento, cuyo coste se eleva a unos 17 millones de euros anuales. Al margen de estos, la Generalitat ya ha pagado otros 110 millones por las obras de construcción del circuito. Pero dado que el encuentro fue “privado” y que, de lo contrario “hubiéramos dado una rueda de prensa”, la alcaldesa de Valencia solo quiso precisar que las conversaciones con el magnate de la Fórmula 1 para mantener el premio van “por muy buen camino”.

La primera edil ha insistido esta mañana en que “cuando se está hablando, dar a conocer la situación puede entorpecer, enturbiar o interponerse en la consecución de los objetivos" fijados, con lo que ha justificado que ella no haya hecho, hasta hoy, mención a ese encuentro. De esta manera, solo ha explicado que desde "antes de las vacaciones" estaba previsto "promover esta reunión conjunta para que se conocieran en el menor tiempo posible" y ha agregado, en esta línea, que había iniciadas "unas conversaciones importantes" desde el pasado mes de julio con el anterior presidente de la Generalitat, Francisco Camps."Tenías primero que dar a conocer a nuestro presidente, que se conocieran mutuamente para retomar esas conversaciones", ha declarado Rita Barberá.

El grupo socialista desveló ayer que el patrón de la fórmula 1 ha cobrado puntualmente los 17 millones del canon correspondiente a los años 2009 y 2010. Un canon del que se acabó haciendo cargo la Generalitat tras comprobarse que la empresa Valmor, organizadora de la prueba, no obtenía beneficios y no podía asumir su pago.