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Iglesias: "Con toda rotundidad las generales se celebrarán en primavera"

El 'lehendakari', Almunia y el ministro de Trabajo abogan por agotar la legislatura Cospedal asegura que su partido está preparado para gobernar

Anabel Díez

Los adelantos electorales no se anuncian hasta el momento en el que empieza a correr el plazo obligatorio. Y esta máxima en política la ha cumplido también la ejecutiva del PSOE por instrucción directa de su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero. “Con toda rotundidad tengo que decir que la voluntad del Gobierno es la de celebrar elecciones generales cuando tocan, en la primavera de 2012”. Así de tajante se ha mostrado Marcelino Iglesias, secretario de Organización, al término de la reunión de la Comisión Permanente de la Ejecutiva Federal del PSOE. “Ese objetivo es plenamente apoyado por la ejecutiva del PSOE”, remachó.

De todas las maneras posibles aseguró que el Gobierno tiene “el deseo, la voluntad y el objetivo” de agotar la legislatura. De esta manera la cúpula socialista quiere salir al paso de opiniones internas muy cualificadas que no dan por seguro en absoluto que el Gobierno pueda llevar la legislatura hasta su cumplimiento en marzo de 2012.

Pero en el afán de alejar el debate electoral, Iglesias aseguró que incluso sin presupuestos para 2012 “la legislatura puede continuar”. Eso sí, de inmediato precisó que sería mucho mejor, y el Ejecutivo trabaja para ese objetivo, dotar a la vida económica de estabilidad con unos presupuestos.

Una de las opiniones cualificadas del PSOE que, por el contrario, han apoyado el adelanto electoral ha sido José María Barreda. “Tal vez sea lo conveniente”, ha dicho el presidente en funciones de la Junta de Castilla-La Mancha sobre el posible adelanto. En declaraciones a Telecinco, el dirigente socialista ha señalado que esa opción, que “siempre ha sido posible, ahora empieza a ser probable”.

El todavía presidente de Castilla-La Mancha ha sido el primero en manifestar lo que para un sector del partido se podría considerar un deseo a voces. Un deseo que el secretario de Organización, Marcelino Iglesias, ha tratado de cortar de raíz tras la reunión de la Ejecutiva socialista: "Con toda rotundidad las elecciones generales se celebrarán en primavera de 2012".

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El ministro de Trabajo aboga por celebrar las elecciones en marzo de 2012 para tener tiempo “suficiente” para realizar las reformas pendientes e incluso empezar a "percibir sus efectos"

Los que se postulan a favor de un anticipo de marzo de 2012 a noviembre de 2011 aducen que los buenos datos de empleo que se prevén para el tercer trimestre mejorarían la percepción que se tiene de la complicada situación económica y podrían ayudar al candidato Alfredo Pérez Rubalcaba a cosechar más votos. Sin embargo, esta razón no termina de germinar en el seno de la familia socialista. Para otra parte del PSOE, concluir con el calendario de reformas pendientes es esencial para garantizar la estabilidad que demanda Europa.

Iñigo Urkullu ha admitido que su formación sí está trabajando "con el escenario realista" de un adelanto de las elecciones generales al mes de noviembre

Es lo que opina otro de los barones socialistas, el lehendakari Patxi López, el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, o el ex secretario general del partido y expresidente del Gobierno, Felipe González, que ha declarado que lo que le conviene a España, "que no a mi partido", es que se complete la legislatura.

El apoyo al anticipo electoral en el seno de la familia socialista no es unánime, aunque partidos como el PNV, de los que depende buena parte de la estabilidad parlamentaria que requiere el presidente José Luis Rodríguez Zapatero para terminar la legislatura, afirmen que trabajan "con el escenario realista" de un adelanto de los comicios a noviembre.

Iglesias ha sido contundente. "La voluntad, el deseo, el objetivo del Gobierno y el objetivo plenamente asumido por el PSOE es que las elecciones generales se celebren en la primavera de 2012". En la rueda de prensa posterior a la Ejecutiva socialista, Iglesias ha aportado un nuevo argumento para mantener la fecha electoral de marzo de 2012. El partido entiende que ahora que se está saliendo de la crisis económica es cuando es más importante aguantar hasta el final de la legislatura. "Para la economía más sostenible que está adoptando el Ejecutivo es esencial que se terminen las reformas que se han tomado".

En sus declaraciones Barreda ha querido dejar claro que la decisión de adelantar las elecciones de 2012 “es prerrogativa exclusiva del presidente del Gobierno”. Algo que también ha compartido el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, en una entrevista a RNE.

Sin embargo Gómez, al contrario que Barreda, se ha mostrado partidario “de agotar los plazos”. A su juicio, los buenos resultados de la Encuesta de Población Activa (EPA) que se prevén para el tercer trimestre no son suficiente razón para adelantar los comicios a noviembre. El titular de Trabajo contradice a los analistas que opinan que el PSOE podría aprovechar el crecimiento de empleo, habitual en la temporada de verano, y favorecer las expectativas de voto, que podían quedar lastradas tras el invierno.

El ministro aboga por celebrar las elecciones en marzo de 2012 para tener tiempo “suficiente” para realizar las reformas pendientes e incluso empezar a "percibir sus efectos". Una opinión que también comparte el lehendakari, Patxi López y el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia.

Para el dirigente europeo acometer las reformas es una prioridad que debe primar por encima de la "situación extraordinariamente complicada" a la que apela Barreda para adelantar los comicios. Almunia ha defendido en TVE que su ejecución permitirá que "los ciudadanos tengan menos preocupaciones y más esperanzas". El vicepresidente de la Comisión cree que las elecciones generales "tienen que ser cuando tocan" y que "de aquí a marzo hay muchas cosas que hacer". Entre ellas, ha destacado la reforma de las cajas, la aprobación de los Presupuestos Generales o el desarrollo del Decreto ley sobre la negociación colectiva. "No se puede elegir el momento de afrontar los problemas, hay que hacerlo cuando vienen", ha concluido.

Por su lado, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch , restó importancia a un posible adelanto electoral . Para Belloch si las elecciones se adelantan a noviembre será una cuestión más vinculada a asuntos puntuales que a una estrategia. Las declaraciones las ha hecho en la cadena SER, donde ha contestado a la pregunta de si contempla ese adelanto. “Yo creo que a estas alturas no tiene importancia que [las elecciones] sean en noviembre o cuatro meses después; no creo que cambie nada sustancial. Me imagino que será una postura más vinculada a una cuestión de tema presupuestario, si hay dificultades o no para prorrogar el presupuesto. Ese tiempo, de noviembre a marzo, es muy poco tiempo y no cambia nada”.

El alcalde Belloch, además, no ha descartado presentarse su candidatura al Senado cuando toquen elecciones generales. “No, autonómico no, pero senador de elecciones generales estoy dispuesto asumirlo porque es compatible con ser alcalde y en tiempos de dificultades económicas está muy bien que el alcalde de Zaragoza tenga una plaza de senador en Madrid, porque es ahí donde está el dinero”.

El lehendakari, por su parte,  ha dicho en la cadena SER que “ignora los tiempos con los que trabaja José Luis Rodríguez Zapatero”, pero que entiende que deben acometerse las reformas que el Gobierno ha iniciado y a cuya consecución se ha comprometido. López no ignora el escollo que para agotar la legislatura supone la falta de apoyos asegurados por parte de otras fuerzas parlamentarias. Pero le ha restado importancia aludiendo directamente al soporte de los nacionalistas vascos. “Más allá de los apoyos acordados con otras fuerzas políticas, el PNV unos días dice que sí y otros que no".

Precisamente el líder nacionalista, Iñigo Urkullu, ha admitido que su formación sí está trabajando "con el escenario realista" de un adelanto de las elecciones generales al mes de noviembre. En referencia a los posibles apoyos que el PNV pueda brindar al Gobierno en el parlamento para asegurar, como desea Zapatero, que los comicios se celebren en 2012, Urkullu ha precisado que los meses de junio y julio son "muy críticos", con "todos los proyectos e iniciativas" que el Ejecutivo pretende llevar a las Cortes Generales. El dirigente vasco ha afirmado en Radio Euskadi, que más allá de los acuerdos a los que pueda llegar el PSOE para agotar la legislatura, lo que subyace detrás del posible adelanto electoral son "las circunstancias internas" del partido.

Los sindicatos también han entrado al debate de la conveniencia de un anticipo de los comicios. El secretario general de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, ha afirmado que "la legislatura está más que acabada". A diferencia de López o de Gómez, el dirigente sindical cree que si Zapatero quiere terminar su mandato para terminar las reformas "casi mejor que lo deje". En una entrevista a Punto Radio, Toxo ha sostenido que el Gobierno "da síntomas de agotamiento extremo" y "tiene puntos de incoherencia" que deberían pasarse "por las urnas".

Cospedal afirma que el PP está preparado para gobernar

La secretaria general del PP, Dolores De Cospedal, sostiene que su partido está preparado para gobernar "ya, en otoño o en marzo". Además, ha explicado esta mañana que el posible adelanto de las elecciones al mes de marzo, como defienden algunos sectores del PSOE, es "necesario", para que los españoles, ha agregado, puedan empezar a vivir la recuperación económica. "Es el momento de que la política española de un giro", ha dicho.

Cospedal ha descartado que su partido vaya a presentar una moción de censura al presidente José Luis Rodríguez Zapatero, para forzar el adelanto de las elecciones, porque considera que puede crear "más frustraciones en el electorado". El PP no cuenta con diputados suficientes para sacar adelante una moción y debería buscar el respaldo de otros grupos. Cospedal ha afirmado que esos acuerdos son "improbables".| EFE

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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