_
_
_
_
_

La Generalitat admite que recibió en mayo un aviso de un posible atentado en La Rambla

Forn sostiene que, tras el 17-A, "el Estado descartó" que la alerta "tuviera relación" con los atentados

Joaquim Forn i Josep Lluís Trapero.Foto: atlas
Jesús García Bueno

La Generalitat admitió ayer, tras negarlo varias veces, que los Mossos recibieron el 25 de mayo un aviso de la posibilidad de un atentado en La Rambla en verano. El consejero de Interior, Joaquim Forn, negó que la alerta llegase de la CIA o de los servicios de inteligencia de EE UU, mientras el jefe de los Mossos, Josep Lluís Trapero, citó en su negativa a la agencia de información y al Centro Nacional contra el Terrorismo de EE UU. Forn sostuvo que tanto la policía catalana como la española constataron que el aviso “tenía muy poca credibilidad” y no guardaba relación con los ataques de Barcelona y Cambrils.

Forn dio a entender que esa alerta, en cualquier caso, nunca habría servido para evitar los ataques que el 17 de agosto dejaron 16 muertos y decenas de heridos. Una de las razones que esgrimió en una tensa rueda de prensa en la que cargó contra los medios de comunicación es que, unos días después de los atentados, “el Estado dijo que ninguno de los avisos recibidos guardaban relación con el ataque”. La segunda razón no la citó, pero se desprende de la investigación policial. La célula de Ripoll, integrada por el imán Abdelbaki es Satty y nueve jóvenes a los que adoctrinó y radicalizó, pretendía atentar inicialmente contra monumentos e iglesias de Barcelona, como la Sagrada Familia. El atropello de La Rambla fue, en realidad, un plan b que la célula improvisó después de que, la noche del 16 de agosto, una explosión fortuita en el chalé de Alcanar (Tarragona) donde acumulaba el material explosivo diese al traste con su plan inicial.

El Periódico de Catalunya publicó ayer una nota enviada por el Centro Nacional contra el Terrorismo de EE UU (NCTC, en sus siglas en inglés) el pasado 21 de agosto al Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco) español que reproduce el aviso remitido el 25 a los Mossos. Allí se les alertaba de que algunas informaciones “de veracidad desconocida” apuntaban a la posibilidad de que el Estado Islámico estuviera preparando un ataque en España, “específicamente, en La Rambla”. El rotativo ya había informado de esa circunstancia —pero sin el documento— el día posterior a los atentados.

Desde entonces, y hasta en cuatro ocasiones, distintos responsables de la Generalitat lo han negado: los propios Forn y Trapero e incluso el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, quien aseguró que “las agencias de inteligencia” solo se relacionan “con otras agencias de inteligencia”. En esas entrevistas, ninguno de ellos agregó que, viniera de donde viniera y fuese cual fuese su credibilidad, los Mossos sí habían recibido un aviso sobre un posible ataque en La Rambla.

Ayer, Forn y Trapero tuvieron que admitirlo, a pesar de que insistieron en que querían “desmentir” la información de El Periódico. Ambos rechazaron que el origen del aviso fueran la CIA o los servicios antiterroristas norteamericanos —Trapero citó a la CIA y el NCTC—, aunque se negaron a revelar la fuente. Además de a los Mossos, ese aviso llegó al CNI, a la Policía Nacional y a la Guardia Civil, según confirman fuentes de la lucha antiterrorista. Todos ellos descartaron dar crédito al aviso, según Forn. El consejero remarcó que, de hecho, esa alerta “no se comentó en las mesas de evaluación antiterrorista” del 25 de mayo y el 8 de junio. Ello es una prueba de que “no era una alerta importante”, añadió.

“Fiabilidad baja”

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

En la misma línea, el comisario Trapero insistió en que el aviso “se recibió y se evaluó” tanto a nivel gubernamental como policial. “Se contrastó con el Estado. Entendimos que la fiabilidad era baja”, sostuvo. El Ministerio del Interior rechazó ayer hacer declaraciones y argumentó que no quiere entrar en polémicas sobre seguridad ciudadana.

El delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, se limitó a decir que la información “existió y se compartió como se hace siempre con los cuerpos de seguridad”. Millo no entró a analizar si se le dio crédito, aunque sí mencionó, de forma genérica, que algunos de esos avisos “o bien han servido para disuadir o bien han resultado falsos”, informa Alfonso Congostrina.

El del 25 de mayo no fue, en todo caso, el único aviso en ese sentido. “Desde hace meses”, dijo Trapero, los Mossos han recibido alertas por ataques terroristas procedentes de fuentes diversas que señalaban “diferentes puntos de Cataluña”, incluidos “centros de culto, infraestructuras, conciertos, acontecimientos deportivos y lugares donde hay grandes aglomeraciones de gente”, entre ellos “La Rambla o la Sagrada Familia”. El consejero subrayó que ninguna de esas informaciones habría servido para evitar la tragedia del 17-A. “Esa hipótesis de que había una información, y que si se hubiera trasladado correctamente hubiera evitado los atentados es absolutamente falsa”.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_