La ley de la reforma exprés se aprobará la próxima semana

El Pleno del Parlament de la próxima semana aprobará la ley de la reforma del reglamento de la Cámara que permitirá aprobar por lectura única la norma cuyo objetivo es facilitar la tramitación de las leyes de desconexión. La primera de ellas es la ley del referéndum para amparar la consulta que el presidente Carles Puigdemont quiere convocar para el 1 de octubre. Lluis Maria Corominas, presidente de Junts pel Sí, ha ratificado este mediodía en el Parlament la disposición de su grupo de aprobar la reforma del reglamento este mes de julio.

La mesa de la Cámara y la Junta de Portavoces se han reunido esta mañana pero volverán a hacerlo este jueves para perfilar el orden del día del Pleno escoba, en el que se aprueban todas las normativas pendientes. La mayoría de grupos de la oposición han presentado enmiendas al articulado de acuerdo con el dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias, que consideró que la reforma del reglamento vulneraba el Estatuto y la Constitución. El plazo para presentar enmiendas acababa hoy a las 12.00 y Joan Coscubiela, portavoz de Catalunya Sí que es Pot, ha planteado que el texto sea devuelto a la comisión de la reforma del reglamento y no al Plenario. Junts pel Sí ha sostenido que no aceptará ninguna "maniobra dilatoria". "La Mesa dictaminará si esas enmiendas son o no congruentes y decidirá si van a comisión o van al pleno. Pero nuestro criterio es que vayan al Pleno", ha señalado Corominas.

"Nuestro objetivo no es retrasar el debate del Pleno sino que se debata de formas digna", ha insistido el ecosocialista, que ha señalado que aspiran a que la reforma no esté exenta de rigor "jurídico" y que proteja todos los grupos parlamentarios. "La ley del referéndum ya es precaria políticamente y no puede ser alumbrada por una reforma que es una cacicada", ha apuntado. Carlos Carrizosa, portavoz de Ciudadanos, ha explicado que sus enmiendas están destinadas a aplicar una medida lógica: a favor de que una proposición de ley se apruebe por lectura única, como en el Congreso o en otros parlamentos autonómicos, siempre y cuando sea factible por la naturaleza y la simplicidad del texto. "Y eso no vale para anular la Constitución, el Estatuto y separarnos de España y de Europa". El PSC, que elevó la proposición a Garantías Estatutarias, considera que la proposición vulnera los derechos de los diputados de la oposición.