40 años de democracia parlamentaria de un solo vistazo

La historia une el arco parlamentario de 1977 con el de 2017 a través de una especie de autopistas, las que describen la trayectoria de los grupos políticos con más apoyo y poder. A esa red principal se suman las carreteras principales, las que dibujan fuerzas con menor representación, y, por último, una suerte de carreteras secundarias que dejan como rastro las incorporaciones y escisiones de movimientos y corrientes políticas.

Los principales vaivenes de 40 años de democracia en las Cortes aparecen recogidos en el gráfico superior, un esquema simplificado de la evolución de los grupos políticos (no los partidos) que, legislatura tras legislatura, han tenido representación en las Cortes. Para navegar, es preciso desplazarse a izquierda y derecha sobre la imagen, con el ratón o con el dedo.

El gráfico representa también los cambios de siglas y los movimientos políticos principales de cada formación, como su integración formal o informal en otras fuerzas. Se puede observar que de las 12 organizaciones políticas que lograron escaño en las primeras elecciones tras la dictadura franquista pocas han llegado a la actualidad sin variación: muchas desaparecieron, se fusionaron con otras o se diluyeron en coaliciones. También se observa que la aparición de fuerzas nuevas no es cosa exclusiva de las dos últimas legislaturas.

Aunque hay fuerzas más estables que otras, el gráfico recoge un gran cambio de las siglas presentes en del Parlamento a lo largo de estas cuatro décadas. Eso sí, con una constante que destaca Jesús Gutiérrez Villalta, profesor de Ciencia Política de la Universidad Carlos III de Madrid: "Cuando un partido tiene buenos resultados electorales, notamos que a él se incorporan corrientes externas e incluso otros partidos. Cuando algo va mal, se producen escisiones, aunque hay formaciones que, por su estructura homogénea, frenan de algún modo esos movimientos de fuga". De esta dinámica, cree el investigador, no se libra nadie. "No será ajena a los nuevos partidos, cuando sufran reveses electorales".

Los grupos se han representado en el eje ideológico de manera aproximada. Su ubicación no implica que su orientación en el espectro izquierda-derecha no haya variado a lo largo de su trayectoria. Tampoco un número mayor de fuerzas es sinónimo de una mayor riqueza ideológica en el arco parlamentario. "Muchas de las fuerzas menores presentes en el Congreso de los Diputados no tienen programa ni implantación estatal. Quizá su presencia se deba a un fracaso del Senado como cámara de representación territorial. Y es que en el Congreso se han mezclado dos ejes que son distintos, el ideológico y el territorial", afirma Gutiérrez Villalta.

El gráfico se ha elaborado con la colaboración del Colegio de Politólogos y Sociólogos de Madrid, el profesor Jesús Gutiérrez Villalta y el investigador Carlos Carmona, ambos de la Universidad Carlos III.