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Orquestas bajo sospecha

Hacienda y la Fiscalía desmontan el emporio que controla hasta el 60% de las verbenas en Galicia

Actuación de la orquesta Panaroma en Lugo.
Actuación de la orquesta Panaroma en Lugo. xosé marra

Hace tres años que la Agencia Tributaria puso su poderosa lupa en el negocio millonario de espectáculos musicales en Galicia que estaba bajo el control del empresario de Pontevedra Ángel Martínez Pérez, Lito, después de llevar más de una década acaparando más de la mitad de las 2.300 verbenas que se celebran cada año en esta Comunidad Autónoma.

Solo con dos de sus orquestas más demandadas (Panorama y París Noia) que también se cotizan fuera del territorio gallego, el Grupo Lito, a través de la sociedad Representaciones Lito, facturaba unos 15.000 euros por poner el colofón nocturno a las fiestas de los pueblos en aquellos Ayuntamientos con mayor presupuesto.

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Pero tras la inspección de Hacienda, la burbuja del rey de las verbenas comenzó a desinflarse provocando el efecto boomerang en todo el sector musical. El meollo del fraude se localizó en la facturación de la empresa a instituciones no oficiales como las comisiones de fiestas que organizan las verbenas y la Fiscalía de Pontevedra constató que en 2011 y 2012, la contabilidad oficial de Espectáculos Lito “no recogía la imagen fiel de la empresa”.

En su contabilidad solo se reflejaban los ingresos de los clientes que querían factura, lo que representaba aproximadamente un 8% de lo facturado. Tampoco se aparecían los gastos por los servicios de las orquestas, que, según el fiscal “son opacas”, ni los de los llamados representantes o conseguidores de los contratos que trabajaban a comisión. El grupo únicamente repercutía como gastos las facturas emitidas por otras empresas del grupo por distintos conceptos como material o transporte.

La investigación de Hacienda acabó en la mesa del fiscal de Delitos Económicos Augusto Santaló que llevará al banquillo este jueves al empresario. Será el tercer intento que hace el tribunal de la Audiencia de Pontevedra para juzgarle después de que Ángel Martínez haya retrasado su comparecencia alegando motivos de salud o el cambio de abogado por pérdida de confianza en él. Defensor y defendido llegaron a protagonizar una insólita escena ante el tribunal cuando los citó a principios de febrero y que acabó costándole al letrado la imposición de una multa de 24.000 euros.

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El fiscal dirige la acusación contra el mayor representante de orquestas de Galicia y a la sociedad de la que es consejero delegado por fraude de IVA y de IRPF y pide para el acusado 14 años de prisión y el pago de una multa de 10, 8 millones de euros. Para la sociedad solicita una multa de 21,6 millones y reclama una indemnización al Estado de más de 9,5 millones.

El desenlace del juicio sentará un precedente para las otras dos causas abiertas contra Ángel Martínez por distintos ejercicios fiscales cuyo montante es incluso superior al que ahora se le reclama. Otra investigación en curso se centra en la orquesta París Noia que lleva la fiscalía de la Audiencia de A Coruña.

La documentación “no oficial” intervenida a Representaciones Lito puso al descubierto los ingresos de las actuaciones por orquesta y el de sus representantes que sitúan al grupo Lito como la empresa que controla cada año entre un 50 y un 60% del sector, lo que supone un promedio de facturación de unos 20 millones de euros y un margen de comisiones que, aunque no es siempre el mismo, ronda el 15% de los contratos.

El fiscal Santaló sostiene que la empresa, Representaciones Lito, realiza funciones de oficina comercial y de representación artística de medio centenar de orquestas, algunas de ellas integradas en su grupo empresarial, pero efectúa este servicio por cuenta ajena, sin retener IVA ni pagar IRPF, alegando que el espectáculo que vende es ejecutado y producido por terceros.

Mientras Lito se defiende como un mero comisionista que solo percibe del 5% de los espectáculos, la fiscalía sostiene todo lo contrario y reclama el pago de los impuestos porque la representación siempre se ejerce “en nombre de la compañía investigada”, que es la que “oferta y vende el producto, estableciendo relación directa con el cliente y aplicando su voluntad a los términos del acuerdo”. Para ello, también argumenta el fiscal, Lito cuenta con una red de más de 50 profesionales denominados agentes de zona o representantes cuya misión no se limita a poner en contacto los clientes con las orquestas. Ellos son los artífices de que la voluminosa cifra de negocio de la empresa.

Hacienda y fiscalía concluyen que en los ingresos declarados por el rey de las verbenas en los dos años analizados se detecta un fraude de 8,9 millones. Lito declaró unas bases tributarias de 2,1 y 1,9 millones de euros frente a las comprobadas por los inspectores de 26 y 23,9 millones respectivamente. Solo del IVA el fraude detectado es de 8,3 millones.

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