El PP desautoriza a Aznar tras las críticas sobre Cataluña
El partido reivindica su estrategia después de que FAES acusara a los populares de tibieza
El PP se defiende de su presidente de honor, José María Aznar. El partido se sacudió este miércoles las críticas que el día anterior les había lanzado el expresidente del Gobierno a través de un “análisis” enviado a los medios desde su fundación, FAES. El documento presentaba a los populares como una formación acomplejada que había “asumido el relato de sus adversarios” políticos y pretendía “expiar” ahora las culpas por haber recurrido al Constitucional el Estatuto catalán. Los populares reivindican su nueva estrategia, esto es, reducir el frente jurídico, retomar el diálogo y negociar en otros ámbitos, como el económico y de infraestructuras, y avisan al expresidente de que continuarán con esa hoja de ruta.
Sus críticas “no son ni mucho menos compartidas”, declaró el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maillo, quien destacó que FAES ya no forma parte del partido —la fundación decidió el pasado octubre romper todos los vínculos con la formación tras más de 25 años de relación—.
Fueron unas declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, a la que Mariano Rajoy ha encomendado la nueva estrategia en Cataluña, las que encendieron a FAES. Soraya Sáenz de Santamaría comentó que podían haberse equivocado al recurrir el Estatuto catalán sin buscar una respuesta con el PSOE al desafío soberanista y la fundación de Aznar interpretó en esas palabras un afán de reescribir la postura del partido. Ni Rajoy ni Sáenz de Santamaría quisieron comentar públicamente los reproches de FAES, pero los populares cerraron filas con la número dos del Ejecutivo.
Maillo defendió que el Gobierno acertaba al intentar “acercar posturas” con la Generalitat. El vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado, aseguró que el partido mantendrá su “hoja de ruta” y cumplirá el programa electoral. La vicesecretaria de Estudios y Programas, Andrea Levy, defendió el diálogo y repitió que ahora lo importante es “remar juntos”.
El coordinador del PP catalán, Xavier García-Albiol, en la misma línea que la vicepresidenta, comentó que “el tiempo había demostrado que una parte de la sociedad no entendió” que recogieran firmas contra el Estatuto catalán y defendió el afán conciliador del Gobierno con Cataluña. Albiol criticó, además, a Aznar por difundir sus críticas. “Las discrepancias tienen que trasladarse en los órganos internos del partido”, declaró en una entrevista en TVE.
El análisis de FAES escuece en Génova, volcada en la organización del congreso nacional del PP, en febrero. Los populares no ocultan que prefieren que Aznar no vaya. “Él mismo se ha situado fuera”, comentaba un dirigente.
Historia de un divorcio
La historia de desencuentros entre Aznar y el hombre al que nombró sucesor es larga, pero se ha recrudecido este año. El martes, llegaba el duro comunicado de FAES. Hace tres semanas, tras la muerte de Rita Barberá, reprochaba al PP que la hubieran “excluido”. En octubre, FAES se desvinculó del partido. En mayo, Aznar reclamó disciplina y más recortes al Gobierno. En abril se enfrentó con Hacienda. En marzo pidió ante Rajoy “nuevos liderazgos”. Tras el 20-D se presentó por sorpresa en un comité ejecutivo del PP para criticar los resultados electorales.
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