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la posición de los barones socialistas

Díaz pide a Sánchez que cuente con los líderes territoriales para sus decisiones

La presidenta de Andalucía cree que el partido ha cometido "errores" y critica la "capacidad interpretativa, dramática y artística" de Pablo Iglesias tras su 'renuncia' a ser vicepresidente

 Susana Díaz, al inicio de la reunión del Comité Federal del PSOE.
Susana Díaz, al inicio de la reunión del Comité Federal del PSOE.C. Álvarez

La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha apelado a Pedro Sánchez a que fomente la unidad interna del PSOE y cuente con los líderes territoriales. Así lo ha hecho en su intervención a puerta cerrada en el Comité Federal. De sus palabras, se desprende un velado reproche al secretario general, al no contar siempre con los dirigentes del partido que piensan de una manera diferente. Díaz ha citado, como ejemplo, su propia experiencia con quienes fueron sus adversarios directos en el PSOE-A: "En momentos difíciles ha habido ocho hombres y mujeres [secretarios generales de las ocho provincias andaluzas] que me han ayudado a que los socialistas andaluces no perdiéramos la autoestima".

Iceta: "Estamos rectificando un error"

Miquel Iceta ha sido el dirigente territorial más contundente en su defensa de aplazar el congreso para elegir al secretario general del PSOE. "Estamos rectificando un error. A veces nos cuesta a los partidos reconocer que nos hemos equivocado, pero yo creo que en enero nos equivocamos. No podemos fijar la fecha de un congreso sin tener claro el calendario político del país", ha expresado el primer secretario del PSC. El Comité Federal, máximo órgano de decisión de los socialistas, ha aprobado el aplazamiento hasta la formación de gobierno, sea cuando sea, por unanimidad.

"Lo más importante es darle a España un gobierno estable, lo antes posible y si no después de la repetición de unas elecciones. El PSOE no puede mezclar un proceso congresual, que ha de ser muy serio y permitir un debate muy en profundidad y con mucha libertad, con otras cuestiones mucho más importantes. Por tanto, venimos a rectificar un error y creo que habrá un consenso amplísimo en el comité federal", ha insistido Iceta.

Iceta, "optimista" respecto a la formación de gobierno -"estamos mejor de lo que estábamos, se ha abierto la perspectiva a un debate a tres bandas"- se lleva reuniendo desde "hace mucho tiempo" con Xavier Domènech, de En Comú Podem. "Intentamos compartir puntos de vista, ser útiles para buscar consenso sobre un tema delicado", ha apuntado el líder del PSC, que ha querido recalcar que "no es conveniente mezclar una negociación sobre la investidura y constitución de un nuevo gobierno con la solución de un problema tan profundo como el que tenemos planteado entre Cataluña y el resto de España".

"Ser diferente te obliga a sumar y a ganar, no poniendo en evidencia lo peor del adversario. Espero que eso sea extrapolable al resto de la organización", ha abundado Díaz. Con esta frase, aludía a las quejas y reproches suyos y de otros presidentes autonómicos que entienden que desde la dirección nacional se ha puesto en marcha una suerte de descrédito hacia los líderes territoriales que discrepan de Sánchez.

La dirigente regional ha lanzado mensajes continuos a la dirección que encabeza Pedro Sánchez a que cuente con quienes no están en su misma línea, como ella hizo con dos casos concretos. "Cuando me sometía a primarias en Andalucía, lo primero que hice fue pedirle a mi compañero [Francisco] Reyes [presidente de la Diputación de Jaén] que me ayudara si queríamos que el PSOE volviese a ser el PSOE que ganara elecciones. El PSOE estaba un poquito mal. Hoy es mi compañero y mi amigo. Hoy el partido está unido". A continuación, ha puesto como otro ejemplo de antiguo adversario y ahora aliado a Antonio Gutiérrez Limones, alcalde de Alcalá de Guadaíra, que compitió con ella por la secretaría provincial de Sevilla. También, ahora, están unidos. "Me ayudó a levantar el partido", ha dicho durante su turno de palabra.

Las palabras de Díaz se han interpretado como un reproche a Sánchez por no haber contado siempre con los líderes territoriales para tomar las decisiones más relevantes tras las elecciones del 20-D. Por ejemplo, la consulta a la militancia sobre el pacto con Ciudadanos, que las bases refrendaron con una participación superior al 50% y un respaldo del 80%.

A su llegada al Comité Federal, el cuarto desde finales de diciembre, Díaz ha instado a hacer "autocrítica" ya que entiende que los socialistas han cometido en las últimas semanas una serie de "errores" que, sin embargo, no ha querido concretar. "Creo que hay muchos errores de los que deberíamos reflexionar para reconducirnos en el futuro y recuperar la confianza de los electores. Es bueno que se haga autocrítica y que siempre la hagamos entre todos", ha observado la dirigente de la principal federación socialista.

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"El PSOE siempre tiene que hacer autocrítica de lo que no hace bien para hacerlo bien en el futuro. No todo lo hacemos bien evidentemente", ha insistido Díaz, partidaria de un PSOE "fuerte, con un proyecto claro y definido". La dirigente andaluza ha negado que aspire, al menos a corto plazo, a liderar a los socialistas. "No estamos en eso, estamos en que España tenga un Gobierno. Toca que España tenga gobierno. La gente no entiende ya en qué punto estamos tras más de 100 días sin gobierno".

Ante las negociaciones retomadas entre el PSOE y Podemos, Díaz se ha mostrado "prudente y respetuosa con quienes están llevando la negociación", aunque ha sido muy crítica con el líder de ese partido, Pablo Iglesias. "Tiene la piel muy sensible... Alguien que ha estado durante meses diciendo barbaridades de los socialistas, que ha insultado a muchos, y el otro día se sintiese ofendido porque yo elogiase su capacidad interpretativa, dramática y artística", ha cargado contra el responsable de Podemos.

La relación de Díaz con el partido que aspira a suceder al PSOE como referente de la izquierda no es buena. Como muestra, gobierna en Andalucía gracias a Ciudadanos. "El gobierno que entiendo es el que cabe en las resoluciones del 28 de diciembre del Comité Federal y el que se sometió a la voluntad mayoritaria de los militantes socialistas. Me siento cómoda en él", ha referido Díaz, que ha matizado que hay cosas que comparte y otras que no, de nuevo sin aclarar cuáles. El máximo órgano del PSOE aprobó, como condición no negociable, que no se celebrara un referéndum de autodeterminación en Cataluña. Iglesias lo sigue defendiendo.

El presidente de Aragón, Javier Lambán, que "hace diez días era más optimista que ahora", cree que su "obligación política es ser todavía optimista" y esperar que la semana que viene "se empiece a hablar en serio" entre los equipos negociadores del PSOE y los dos partidos emergentes. El dirigente maño se ha mostrado muy receloso con la formación de Iglesias. "Hasta ahora no he visto señales claras e inequívocas por parte de Podemos de que realmente esté dispuesto a hacer las cesiones que son necesarias para que en España haya un gobierno. Ni siquiera sería transversal o de mestizaje, sería un gobierno que impone la responsabilidad de las fuerzas politicas tras el resultado de diciembre". "Cada vez hay más presiones internacionales y problemas domésticos sin resolver. Las llamadas fuerzas del cambio tienen que impulsar un gobierno de manera imperativa por muchas cesiones que tengan que hacer", ha añadido expeditivo.

Sobre el retraso del congreso del PSOE, que federaciones como la de Andalucía defendieron que fuera en mayo, Lambán es "absolutamente partidario" de "secundar" la posición de Pedro Sanchez y retrasarlo sine die. "Era erróneo fijar una fecha en aquel momento [en el Comité Federal del 30 de enero]. La solución que plantea era obvia desde hace mucho tiempo y creo que no habrá demasiados problemas para aprobarla por unanimidad". Así ha sido.  

La agenda institucional debe primar sobre la agenda partidaria", ha apuntado en este sentido Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana. "Ahora estamos en el tramo final de una negociación. Hay que ver si es posible que haya o no gobierno, y para eso el secretario general y el candidato del PSOE debe tener todo el apoyo del partido. A partir de estas circunstancias, se iniciará otra etapa, pero esta es fundamental. El PSOE tiene que poner todo su coraje y ambición en lo que han dicho los ciudadanos y que haya gobierno", ha valorado. Sobre la hipotética entrada de Podemos en un gobierno de coalición presidido por Sánchez, Puig considera que "la aritmética necesita transversalidad, y esto hay que entenderlo así". "No hay que tener una posición ni contraria ni favorable. Podemos tiene un respaldo ciudadano y tiene que ser atendido, como lo tiene el PSOE y Ciudadanos. Tiene que haber un espacio de intersección... Si se leen los programas de los tres partidos, existe suficiente agenda para un gobierno de una legislatura", entiende Puig.

Para el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, "optimista" frente a las dudas de Lambán, lograr un acuerdo "no solo es una obligación moral con los ciudadanos sino un esfuerzo apasionante desde el punto de vista democrático. El esfuerzo que vamos a hacer, aunque mañana hubiera elecciones será rentable. Se exigen acuerdos".

"El PSOE tiene los cimientos de la negociación muy claros y va a hacer todo lo posible menos vender su alma. No vamos a traficar ni alquilar nuestros valores, pero dentro de esos límites, que son muy amplios porque somos un partido incluyente y moderado, vamos a intentar llegar a acuerdos", ha subrayado García-Page, "lo que está pasando desde el 20 de diciembre no estaba en ningún guion".  "Se nos puede a acusar a los políticos de hacer teatro y postureo, pero si en vez de discutir en público nos hubiéramos sentado por detrás se nos hubiera acusado de lo contrario, de tenerlo pasteleado. La gente reclamaba un cambio en la metodología política y se ha logrado, hasta el punto que no la controlamos ni sabemos prever la última de las decisiones", ha reconocido el presidente manchego.

Más somera ha sido Sara Hernández, secretaria general en la Comunidad de Madrid desde el pasado julio, aunque nadie dude de su apoyo a Sánchez: "Hay que trabajar hasta el final, sabemos que es complicado, pero hay que vencer todas las dificulatdes". La alcaldesa de Getafe espera que Podemos "responda" al requerimiento de los socialistas y se forme gobierno antes de la fecha límite del 2 de mayo. De lo contrario, el 26 de junio se repetirán las elecciones generales.

Sobre la viabilidad de un tripartito de PSOE, Podemos y Ciudadanos, Francina Armengol, presidenta de Baleares, ha advertido que "sobre los futuribles no hay nada escrito" pero cree prioritario que haya un gobierno presidido por Pedro Sánchez. "Hemos llegado a un acuerdo con Ciudadanos refrendado por la militancia, pero es necesario que sea más amplio. No tengo una bola mágica, pero en Baleares tenemos un gobierno que funciona y va retornando derechos a los ciudadanos, por tanto creo que hay un espacio de negociación donde me gustaría que Podemos pudiera estar", ha concluido Armengol.

Al cónclave socialista no han podido asistir Javier Fernández, presidente de Asturias, ni Guillermo Fernández-Vara, de Extremadura.

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