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El PP a Puigdemont: “El Estado de derecho no está en funciones”

Rajoy y el PP concentran todas sus negociaciones en mantener sus candidatos a las presidencias de las Cortes

Javier Casqueiro
Pablo Casado en rueda de prensa el martes pasado.
Pablo Casado en rueda de prensa el martes pasado.J. J. Guillén (EFE)

Mariano Rajoy ha vuelto a reunir en la mañana de este lunes a su Comité de Dirección del PP para debatir tanto sobre la endiablada situación en Cataluña como sobre el momento de las negociaciones para la constitución de las Cortes y su hipotética investidura otra vez como presidente del Gobierno. No ha habido grandes novedades ni aportaciones. Rajoy y el PP están concentrados ahora en negociar in extremis con Ciudadanos y algún otro grupo los votos suficientes para conseguir las presidencias del Congreso y el Senado por ser el grupo mayoritario y más votado en las urnas. En teoría y en estos momentos no se renuncia a nada. Sobre Cataluña, el PP insiste en avisar al nuevo presidente catalán, Carles Puigdemont, de que "todos los instrumentos" de la ley y la Constitución siguen en vigor y "Estado de derecho no está en funciones".

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Pasan los días y las semanas y las negociaciones sobre la investidura de Rajoy no avanzan nada. En el PP están volcados ahora en la primera disputa, el miércoles, de la constitución de las mesas y los órganos de dirección del Congreso y el Senado. El PP no quiere revelar aún sus candidatos. Mañana serán refrendados y dados a conocer en una Junta Directiva Nacional, convocada por la tarde. Rajoy ha dado instrucciones, en cualquier caso, de presentar sus aspirantes aunque el PSOE pacte con otras formaciones de izquierdas su propio candidato, en este caso más que probablemente Patxi López. El PP mantendrá el suyo hasta el final aunque solo sea para evidenciar que el PSOE y otros partidos aliados no respetan la costumbre de que ocupen esos puestos miembros del grupo más votado en las urnas.

Es parte de una estrategia más larga que enlaza con las conversaciones ahora paradas para la investidura. El PP quiere que el PSOE se moje y vaya mostrando hasta donde está dispuesto a negociar, con quién y a cambio de qué.

Los populares valoran la actitud y el respaldo mostrado hasta ahora por el líder socialista, Pedro Sánchez, con el renovado desafío catalán. En ese punto hay instrucción clara de no atacar al secretario general del PSOE. La intervención del dirigente del PSC, Miquel Iceta, durante el debate de investidura de Puigdemont se considera demasiado tibia , pero se justifica por la necesidad de buscar su espacio propio al apropiarse Ciudadanos y el portavoz en Cataluña del PP, Xabier García Albiol, de los papeles más duros. Pero se espera que Sánchez no ceda en ese asunto y se mantenga con el actual apoyo inequívoco al Gobierno en el Estado de derecho y el respeto a las leyes y la Constitución.

Advertencia a Puigdemont

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El portavoz oficial del PP, Pablo Casado, lo que sí ha querido este lunes es advertir al nuevo presidente catalán, al que identificó con el radicalismo más independentista, de que aunque el Gobierno central esté ahora en funciones "el Estado de derecho no está en funciones" y todas las instituciones y organismos están en alerta y pendientes para actuar con todas las consecuencias. Casado no ha llegado a decir explícitamente que el Gobierno está a punto de aplicar la suspensión de la autonomía catalana como permitiría el artículo 155 de la Constitución y como anticipó el propio Albiol, pero sí ha señalado varias veces que todas las leyes están en vigor y podrían ser ejecutadas si hace falta.

Casado, eso sí, ha ensalzado la posibilidad de que antes de llegar a ese punto sea el propio Tribunal Constitucional el que se asegure de que sus resoluciones se cumplan, y ponga en marcha las reformas de su ley que se cambiaron en septiembre y que permiten las sanciones y las inhabilitaciones de los cargos públicos que no las respeten. El PP mantiene, como hizo el domingo por la noche el propio presidente en funciones Mariano Rajoy en La Moncloa, que el programa separatista defendido en su investidura por Puigdemont no existe porque está anulado de hecho por el Constitucional.

El PP ha respondido, por otra parte, a Pedro Sánchez y su oferta de abordar ya la reforma de la Constitución para ir a un modelo federal asegurando que, aunque están dispuestos a mejorar la Carta Magna, no creen que sea oportuno ni hacer tabla rasa ni poner en marcha sistemas asimétricos, sino contar ahora con el máximo respaldo parlamentario y con un presidente experimentado y de prestigio internacional para responder al desafío soberanista. Ese candidato consideran que es Rajoy y no piensan cambiarlo para el debate de investidura. Al menos por ahora.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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