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El cara a cara también se siguió fuera de España

El 22% de las personas que siguió la retransmisón en directo lo hizo desde el exterior en busca de información sobre la política española

Retransmisión en directo del debate de EL PAÍS.
Retransmisión en directo del debate de EL PAÍS. EL PAÍS

El primer debate electoral a través de Internet se siguió también fuera de España: el 22% de las personas que se conectaron lo hicieron desde el exterior en busca de información sobre la política española y de comparaciones con la de cada país, a pesar de las dificultades para verlo en algunas ciudades en los primeros minutos.

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Los debates que preceden a las elecciones en Alemania suelen ser rígidos y se dividen entre los de los candidatos de los dos grandes partidos y los de fuerzas más pequeñas: ese es uno de los motivos por los que Lisa Caspari, periodista de Die Zeit, vio el encuentro organizado por EL PAÍS: “Sigo el debate con interés, sobre todo por la situación novedosa de tener cuatro partidos tan cerca en las encuestas. Me interesan sobre todo Ciudadanos y Podemos, que representan dos vías distintas para lograr un cambio político”. “¿Pueden atisbarse coaliciones futuras después de esta hora y media?”, se pregunta.

“Es una buena oportunidad para ver la calidad de los candidatos; para quienes vivimos fuera son de agradecer este tipo de debates, que están pensados para verse a través de Internet”, dice Igor Urra, secretario general de la Cámara de Comercio de España en Gran Bretaña. “El bipartidismo ha muerto y las encuestas están tan ajustadas que cualquier error o acierto de un candidato puede hacer que cambie el resultado. En Reino Unido, Nick Clegg protagonizó un gran debate en 2010 y los liberaldemócratas subieron mucho en las encuestas de un día para otro”, subraya.

Simón, estudiante francés de 22 años, sigue de cerca la actualidad española y francesa y muestra interés por las elecciones españolas “porque puede haber un gran cambio”. “Me parece estupendo el formato, que sea interactivo, creo que Francia debería inspirarse en este tipo de cosas”, añade. Chema Díez, desde Reino Unido, espera “menciones continuas sobre la ausencia de Rajoy” en este cara a cara y confía en que su ausencia “sea castigada con un descenso de los votos”.

Desde Roma, el estudiante Martí Puig echa de menos “candidatos de más partidos, aunque no sería tan fácil seguirlo para los espectadores”. “Pedro Sánchez ha tratado de elevar la mirada, Rivera buscaba más el cara a cara, Iglesias estuvo bien en el bloque económico”, resume Céline, profesora de secundaria en Bruselas.

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Marina, de 29 años, residente en París, echa de menos “a Alberto Garzón” y explica que ha seguido el debate para después “comentarlo por WhatsApp”. Samuel, desde Bélgica, aplaude la viveza del duelo, “mejor que el tradicional, pactado por los grandes partidos, que suele ser una sucesión de monólogos”. Lamenta que no estuviera IU y que no se hablara de asuntos como Europa y los refugiados.

Con información de Claudi Pérez (Bruselas), Luis Doncel (Berlín), Ana Teruel (París) y Pablo Guimón (Londres).

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