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Las dos almas socialistas

Nunca como ahora los dirigentes territoriales del PSOE han sentido la necesidad de volcarse en Cataluña

Anabel Díez

Hubo un tiempo, allá por los noventa, en el que muchos, muchísimos catalanes miraban al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con intenso afecto, y en todo caso, con enorme respeto. En ese tiempo, el líder socialista español Felipe González era aclamado por miles y miles de catalanes en el Palau San Jordi con escenografías que rozaban la apoteosis a la que contribuían, con su presencia y su palabra, personajes relevantes del mundo de la cultura catalana. Era un tiempo en el que el PSOE gobernaba España y el PSC obtenía magros resultados en Cataluña. En ese tiempo se decía que dos almas habitaban en el socialismo catalán y cubrían a quienes votaban socialista —porque existía el PSOE— y a quienes se sentían identificados con el catalanismo.

Ese tiempo terminó y el hechizo mantenido durante muchos años perdió su efecto. “Los hijos de quienes votaban a Felipe ya no votan al PSOE”, explica un dirigente de entonces. Como ninguna otra fuerza política, el voto del PSC sufre una suerte de centrifugación en todas las direcciones de la que se benefician Esquerra, ICV, Podemos, la CUP y Ciutadans.

¿Por qué? El socialismo catalán no está suficientemente involucrado en el devenir de un proyecto autónomo catalán, para muchos; para otros, no defiende con la valentía necesaria la españolidad de Cataluña. Esta percepción de la sociedad catalana llena de consternación a los socialistas del resto de España.

Nunca como ahora los dirigentes territoriales del PSOE han sentido la necesidad de volcarse en Cataluña. No es un rescate, no es una llamada a rebato, dicen, sino la necesidad de que la sociedad catalana no se parta en dos. Los presidentes autonómicos socialistas sienten la responsabilidad de ofrecer un proyecto de país en el que Cataluña sienta reconocida su singularidad dentro de una España “que no es la de Mariano Rajoy”.

No es un desembarco sino un hecho político de primera magnitud el que conforma la intensa campaña en Cataluña de Pedro Sánchez, del resto de los presidentes autonómicos y de Felipe González, con la vista puesta en el miércoles 23 de septiembre, cuando Sánchez y González compartan escenario en LHospitalet de Llobregat. El día anterior habrá estado la presidenta andaluza, Susana Díaz. En esta ocasión, como nunca antes lo había hecho, el PSC ha decidido, con su líder Miquel Iceta, ir de la mano del PSOE. “Podéis contar con los socialistas”. Esta llamada a los catalanes del presidente asturiano, Javier Fernández, busca el apoyo de los hijos de quienes antaño les votaban … y el de sus padres. 

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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