Libertad para los dos brigadistas detenidos tras combatir contra el IS

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha dejado en libertad, aunque imputados por un delito de integración en organización terrorista, a Pablo D. O. y Álvaro F. R., los dos españoles que fueron detenidos tras combatir contra el Estado Islámico durante seis meses después de integrarse en milicias kurdas del YPG en Siria.

Velasco, a petición de la fiscal Teresa Sandoval, les ha impuesto a ambos, como medidas cautelares, comparecencias semanales en el juzgado más próximo a su domicilio, la retirada del pasaporte y prohibición de salir de España, han informado fuentes jurídicas.

Durante su declaración, los dos jóvenes, que fueron detenidos tras retornar de Siria hace varias semanas, han reconocido que estuvieron en el llamado YPG, el Ejército del estado de Rojava, en la parte kurda de Siria combatiendo en labores defensivas contra Daesh, acrónimo en árabe del Estado Islámico. Ambos jóvenes, que han abandonado la Audiencia Nacional poco después de las cuatro de la tarde sin hacer declaraciones, han contado al juez que la organización para la que combatieron no pertenece ni tiene vinculación alguna con el Ejército de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), organización catalogada de terrorista en Estados Unidos y la Unión Europea.

Según fuentes jurídicas, los jóvenes han contado al juez que durante su estancia en Siria llegaron temer por su vida y que creen que no llegaron a causar bajas en el Daesh. Según relataron, viajaron a la zona de conflicto por "solidaridad" con las milicias kurdas, y tuvieron una semana de instrucción con un fusil de asalto AK-47.

Los españoles divulgaron un vídeo en el que ambos hablan desde el desierto sobre cómo estaban combatiendo sobre el terreno en la "guerra revolucionaria" emprendida por las milicias kurdas para derrotar a "la bestia fascista del Estado Islámico". Uno de los españoles se identificaba como Paco Arcadio.