El anterior fiscal general del Estado arremete contra el nuevo Código Penal
Torres-Dulce lo considera “peligrosamente inservible para los derechos sociales”
El ex fiscal feneral del Estado, Eduardo Torres-Dulce ha criticado con dureza el nuevo Código Penal, que ha entrado en vigor este miércoles, durante una mesa redonda con motivo del cierre de un curso del Colegio de Abogados de Valencia. En su opinión, el Código Penal es un indicador de pacto social, “un test de las garantías y libertades de nuestra sociedad”, aunque con la reforma, el “legislador ha pasado de ser garante a gestor, con un aspecto autoritario”.
Torres-Dulce considera que el nuevo Código Penal “es peligrosamente inservible para la garantía de los derechos sociales y daña el principio de legalidad”. Respecto a la reforma, añadió que “la mayoría de cambios se han producido por razones mediáticas y, sencillamente, no existe el principio de proporcionalidad a la hora de imponer una sanción”.
En el mismo acto, celebrado este martes, el ex vicepresidente del Tribunal Constitucional Tomás S. Vives, manifestó, a propósito del conflicto entre la libertad de expresión y el derecho al honor, que el Derecho administrativo sancionador existente antes de la reforma era “suficiente para cumplir las obligaciones”. En ese sentido, previno: “A la larga, lo pueblos que pierden la libertad crean sociedades en las que no se puede vivir. çEspero que entre estas no esté la nuestra”.
Respecto a la prisión permanente revisable, el magistrado del Tribunal Supremo Luciano Varela no encontró otros motivos para afundamentara que "querían era ponerla”. Todos los grupos parlamentarios, salvo el PP, se han sumado al recurso ante el Tribunal Constitucional contra la prisión permanente revisable contenida en el Código Penal elaborado por el PSOE y, además, se han comprotetido a dererogarla. En cuanto a la transformación de la falta en delito leve, incidió en que el juicio de faltas plantea problemas difíciles de resolver: “Lo que estamos haciendo es huir del Derecho Penal”, añadió.