_
_
_
_
_

Iglesias ve un “problema trágico” en el escenario que dejó ETA en Euskadi

"El conflicto en el País Vasco ha perdido algo de su centralidad", dice en una entrevista

Pablo Iglesias, el 30 de abril.
Pablo Iglesias, el 30 de abril.Claudio Álvarez

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, considera “un problema político trágico” que “aún” haya “entre 400 y 500 presos [de ETA] retenidos en cárceles a cientos de kilómetros de sus familias”, según afirma en una entrevista para la revista inglesa New Left Review. Aunque el líder de la formación emergente menciona abiertamente la dispersión de presos como parte de ese problema, matizó que “resulta evidente” que la expresión abarca a la situación en Euskadi en su conjunto. La conversación es del pasado 15 de abril, más de un mes antes de las elecciones municipales y autonómicas del 24-M, y en ella Iglesias avanzaba que todos los acuerdos poselectorales debían ser evaluados en función del objetivo principal de Podemos: ganar las elecciones generales.

“La cuestión nacional”

En la publicación política de izquierdas, fundada en 1960 en Reino Unido, Iglesias sostiene que en los últimos años “el conflicto en el País Vasco ha perdido algo de su centralidad, que era esencial para el régimen”, por el alto el fuego de ETA y el posterior cese definitivo de la lucha armada en octubre de 2011. “Aunque aún hay entre 400 y 500 prisioneros retenidos en cárceles a cientos de kilómetros de sus familias”, prosigue el texto.

Para el líder de Podemos, “la cuestión nacional” es probablemente el asunto más importante que ha dejado abierto “el régimen del 78”, y es un asunto que en su opinión ha estado “sangrando abiertamente” desde la Transición tanto en el País Vasco como en Cataluña y “en menor medida en Galicia”.

Según su análisis, a medida que la “cuestión vasca ha ido perdiendo centralidad”, la catalana se ha ido haciendo más “prominente”.

Ante la polémica causada por las palabras de Iglesias, el número dos de Podemos, Íñigo Errejón, afirmó: “No tiene nada que ver con ninguna posición sobre el terrorismo, tiene que ver con que una pena [de cárcel] se aplica a una persona y no a las familias”. Según Errejón, el acercamiento de presos a cárceles próximas a sus casas es algo que en España han propuesto o realizado en distintos momentos “tanto Gobiernos del PSOE como del PP”, informa Francesco Manetto. Y añadió: “Sería peligroso que en un año en el que tenemos tantas cosas importantes en juego en España intentemos distraer con cuestiones que se deben tratar más desde la sensibilidad de Estado”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_