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El PSOE se lanza en busca de un espacio electoral entre PP y Podemos

Susana Díaz rechaza los pactos: “Estoy tan lejos de uno como del otro”

Pedro Sánchez ha aprovechado su visita a una lavandería en Vallecas para jugar un partido de baloncesto en silla de ruedas organizado por el CERMI.Foto: atlas

Atrapado entre el partido en el Gobierno, el PP, y la formación emergente y puntera en las últimas encuestas conocidas, Podemos, el PSOE está buscando un espacio en un tablero electoral que está en proceso de cambio. Los socialistas, que han gobernado España 21 de los 37 años de democracia, atraviesan ahora un momento complicado, con una sangría de votos constante, e intentan frenar un debate que saben que les perjudica: la posibilidad de que tras las próximas elecciones generales sea necesario un pacto para garantizar la estabilidad de un Gobierno en el que ellos podrían ser clave, tanto por la izquierda como por la derecha.

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La mera alusión de la número dos del PP, María Dolores de Cospedal, a que contemplaría una gran coalición con el PSOE en caso de que su partido no tuviera mayoría absoluta en los comicios del próximo año ha causado un enorme revuelo, aunque luego la dirigente popular matizara sus declaraciones. Los socialistas se apresuraron a negar con contundencia esta hipótesis, ansiada por algunas de las principales empresas del país, que la ven como una salida razonable para garantizar la estabilidad cuando los sondeos auguran el fin del bipartidismo. La incertidumbre que genera Podemos en el mundo económico está detrás de la idea de la gran coalición PP-PSOE que los segundos repudian.

El objetivo de los dirigentes socialistas es marcar un perfil propio que los diferencie tanto del PP como de Podemos y ahondar en la búsqueda del electorado perdido. En definitiva, recuperar la centralidad en el debate político para lograr una nueva mayoría social. De ahí que en las últimas semanas hayan rechazado, entre otras cuestiones, un pacto contra la corrupción con el Gobierno, acorralado por las pesquisas del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz.

Susana Díaz, presidenta de la Junta de Andalucía y la dirigente socialista con más poder institucional, dejó este miércoles clara esta idea de diferenciación de sus dos principales adversarios políticos. “Estoy tan lejos del PP como de Podemos”, subrayó Díaz. Para la líder de los socialistas andaluces, el partido que preside Mariano Rajoy es un “barco a la deriva” que está todavía en proceso de hundimiento. “Lo que no puede pretender, después de haber hecho tanto daño en tres años en los que los ciudadanos han visto que les engañaron prometiendo la felicidad y lo que han traído es más sufrimiento, es querer agarrarse al PSOE. Yo eso no lo voy a permitir”, dijo Díaz, en un acto en Huelva, informa Efe.

Y con la misma rotundidad quiso marcar distancias con Podemos, la formación que dirige Pablo Iglesias. “Entiendo que los ciudadanos desencantados, cabreados, con desasosiego, busquen ahí la manera de manifestar esos sentimientos, pero no me identifico con ellos, me siento muy lejos”, afirmó la presidenta andaluza, para quien el partido recién nacido, y que puede arañar a los socialistas casi un tercio de su electorado según un cálculo interno, “genera incertidumbre e inseguridad”.

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La idea de la gran coalición también fue impugnada por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. “No habrá, lo que habrá serán pactos en beneficio de los ciudadanos”, recalcó Sánchez, quien quitó todo crédito a las palabras de la secretaria general del PP. “Los españoles han aprendido a lo largo de estos años que a la señora Cospedal no hay que hacerle caso”. Sí se pronunció el líder de los socialistas sobre los “cuatro grandes pactos” que, en su opinión, necesita España. El principal, la reforma de la Constitución, una vía que el Gobierno del PP desdeña de momento y de la que los socialistas están haciendo bandera. Los otros tres serían sobre la educación, la energía y la revitalización de la languideciente Ley de Dependencia.

La dirección del PP se limitó a enfriar la hipótesis de pacto global con los socialistas sin llegar a rechazarla con rotundidad. El portavoz adjunto en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando, consideró que “en este país ha habido dos grandes formaciones en torno a las cuales ha pivotado el Gobierno”, y, en este contexto, apoya el diálogo: “No sé si para una gran coalición, en este momento no es el panorama político que tenemos, pero es importante que nos podamos entender en asuntos importantes”. En la misma línea, el responsable de política autonómica de los populares, Javier Arenas, señaló que el único pacto que se plantea su formación es “con los ciudadanos”. En cualquier caso, “pactos y acuerdos de Estado con el PSOE”. De hecho, fue el propio Arenas quien durante esta legislatura intentó sellar un acuerdo de mínimos con el principal partido de la oposición sobre la reforma local, un intento que fracasó.

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