El Gobierno trata de atajar la crisis de la corrupción con casi 300 jueces más

El Gobierno ha reaccionado a la presión social ante la oleada de nuevos escándalos de corrupción con el anuncio de medidas de refuerzo a la justicia, cuyos representantes reclamaron precisamente ayer una reforma y más medios para poder contribuir a la regeneración de la democracia. El presidente Rajoy ha anunciado este jueves que el Consejo de Ministros aprobará mañana la creación de 112 plazas de magistrado y 167 plazas de jueces de adscripción territorial, además de dos nuevos jueces destinados a la Audiencia Nacional. Rajoy ha aprovechado también para respaldar a la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, cuestionada tras la detención de su ex número dos, Francisco Granados, en la Operación Púnica. "Aguirre es un activo muy importante del partido y cuenta con mi apoyo", ha destacado el presidente.

"Esperanza Aguirre se equivocó como yo y como todos los que estamos aquí. ¿O es que hay alguien que no se ha equivocado alguna vez en su vida? Yo tengo que ser justo y tengo que ser equilibrado", ha respondido Rajoy en conferencia de prensa en La Moncloa junto a la presidenta de Chile, Michelle Machelet, sobre si la dirigente del PP tiene alguna responsabilidad en la trama de corrupción en la que su exconsejero de Presidencia tiene un papel clave.

El jefe del Ejecutivo ha anunciado también la puesta en marcha mañana del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, el organismo encargado de velar por el cumplimiento de la Ley de Transparencia. Rajoy ha defendido que no adopta medidas "extraordinarias", sino que las que ha anunciado ya estaban previstas, pero que el Gobierno va a seguir "haciendo propuestas y aprobando leyes" para tratar que los ciudadanos recuperen la confianza en las instituciones.

El presidente ha lanzado hoy, de hecho, varios mensajes contra el desapego. Rajoy ha respondido a la pregunta de un periodista chileno que no cree que las reglas actuales de la política estén agotadas, y ha enfatizado que en España no hay impunidad: "Quien la hace, la paga, y en España están actuando los tribunales, la Agencia Tributaria y el resto de organismos". "Lo que vamos a hacer es facilitar todos los medios personales y materiales a los jueces para que estas cosas no se vuelvan a repetir en el futuro", ha remachado.

La presidenta chilena, un país donde también hay escándalos de corrupción, ha reconocido que el sistema político requiere reformas. "Es necesario que el sistema político sea más transparente. Eso es un desafío en Chile, en España y en otros países europeos", ha asegurado Bachelet. "Todo lo que se pueda hacer para separar la política de los negocios lo haremos, y por eso vamos a trabajar en que los partidos tengan financiación pública", ha prometido la mandataria latinoamericana.

Los dos presidentes han hablado expresamente del riesgo de que los populismos triunfen si no se consigue reformar la política. Rajoy, sin mencionarlo expresamente, se ha referido también a Podemos, un partido al que en el PP temen cada vez más ante la indignación social que están causando los casos de corrupción, tanto que en el partido se ha instalado una gran preocupación ante los datos del barómetro de CIS que están ya ultimándose y reflejarían una importante subida de Podemos. Bachelet ha abogado por "reencantar" a los ciudadanos con la política porque "hay nuevas formas de representación de sectores que no se sienten identificados con los estilos de liderazgo". "Tenemos que hacer buena política luchar contra la política alejada de la gente", ha insistido.

Rajoy ha recordado que en Europa ha habido "populismos" que han logrado muchos votos en Francia, Italia o Reino Unido. El presidente recordó que en las últimas elecciones europeas, en España, "a pesar de la caída los dos grandes partidos tradicionales mantuvieron las primeras posiciones". "Debemos estudias las razones y actuar. Un factor muy importante es la grave crisis económica", explicó. Y otro, aseguró evitando de nuevo la palabra corrupción, es "el conjunto de noticias que hemos conocido en las últimas semanas". El presidente, en todo caso, hizo una encendida defensa de un sistema bipartidista fuerte, en aras de la estabilidad. "Los países con más estabilidad y crecimiento del mundo desarrollado son los que tienen dos grandes fuerzas de centro izquierda y centro derecha, que con el paso del tiempo van aproximando posiciones", ha concluido Rajoy.