_
_
_
_
_

El fiscal pide 4 años de cárcel a una sindicalista que actuó en un piquete

Unos 300 activistas sindicales están imputados por diferentes casos de protesta y huelga.

La secretaria general de CC OO en Baleares, Katiana Vicens, intervino en la estación central de autobuses de Palma con los piquetes de activistas al inicio de la jornada de huelga contra la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy, del 12 de marzo de 2012. Al subir a un autocar en servicios mínimos, el chófer y ella discutieron, protagonizaron un zarandeo y la luna del vehículo quedó fracturada. Este asunto motivó una denuncia con juicio penal.

Este lunes la fiscal de Palma Amparo González exigió una pena de cuatro años y medio de cárcel para la líder sindicalista a la que acusa de un delito contra los derechos de los trabajadores y otro de daños. En el incidente, el conductor se manifestó bloqueado en su derecho al trabajo, se dijo “avasallado y maltratado en un tumulto”. Recalcó que Vicens le insultó al llamarle “esquirol” y que arrancó el cartel de servicios mínimos del frontal. Un policía nacional indicó que la dirigente sindical rompió la luna frontal del bus con la mano al retirar el cartel con violencia.

La fiscal González advirtió con insistencia que en este caso se da “una manipulación de la opinión pública. Se ha producido y se producirá”. Explicó que no se discute el derecho de huelga ni la libertad sindical o los piquetes y que no se juzga a un sindicato sino la vulneración de los derechos de otros. “Hay quien nos quiere engañar con la manipulación informativa”, reiteró la acusadora que pretendió que la sindicalista se quitara una pequeña chapa de solidaridad sobre su caso, que entendió era una falta de respeto o una presión al tribunal; ambos extremos los rechazó la magistrada Margarita Beltrán. La fiscal también reprochó a Katiana Vicens que sonriera al ser identificada en el banquillo por el denunciante.

La sindicalista proclamó que actuó dentro de la legalidad para lograr que "el máximo número de trabajadores se sumara a la huelga". Negó insultos o amenazas al conductor del vehículo y subrayó que no observó ninguna luna rota. Detalló que el chófer le cogió de la mano y le "zarandeó violentamente". Narró que “al intentar apoyarme, hice sin querer que se cayera el cartel de servicios mínimos. Fueron tres segundos y no vi nada, pero me sorprendió muchísimo la actitud del conductor. No le conozco, a lo mejor te una enemistad conmigo que yo no sé".

La líder balear de CC OO defendida por el abogado Josep Perelló fue respaldada en la sala por sindicalistas y políticos, entre ellos Ignacio Fernández Toxo máximo responsable estatal del sindicato, por el dirigente de Izquierda Unida, Cayo Lara, la líder del PSOE, Francina Armengol y del grupo Més, Biel Barceló.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_