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‘IN MEMORIAM’

Miguel Romero, la lucidez de un insumiso

Periodista, ensayista y activista social, mantuvo toda su vida la fidelidad al espíritu de mayo del 68

Después de una dura y prolongada lucha contra el cáncer, Miguel Romero Baeza (Melilla, 1945) ha fallecido el 26 de enero en Madrid. Periodista y editor de la revista bimestral de izquierda alternativa Viento Sur, su trayectoria política es representativa de una parte de la generación que en los años sesenta emergió en la lucha antifranquista y que, después de mayo del 68, decidió dedicar su vida a la construcción de un proyecto político revolucionario e internacionalista. Fue militante del Frente de Liberación Popular (FLP) en los años 66-69, hasta su disolución, para ser luego cofundador de la Liga Comunista Revolucionaria (LCR) en 1971, de cuyo órgano de prensa, Combate, fue director durante varios años así como de la edición española de Inprecor. Luego formó parte del equipo dirigente de la Cuarta Internacional que animó Ernest Mandel. Tras el fracaso de la fusión con el Movimiento Comunista (MC) en 1993, su actividad estuvo centrada en la dirección de Viento Sur, simultaneándola con su participación en distintas organizaciones sociales (trabajó durante muchos años en ACSUR-Las Segovias) y en Espacio Alternativo, organización que se configuró como corriente dentro de Izquierda Unida hasta que en 2008 decidió abandonarla y refundarse como Izquierda Anticapitalista, con una nueva generación al frente.

Miguel Romero, Moro, como le llamábamos sus amigos y amigas, se salvó de la represión franquista, pero justo en plena Transición, en 1978, fue a parar un mes a la cárcel de Carabanchel por dos artículos publicados en un dossier titulado ¡Viva la República! por la revista Saida y negarse a pagar la fianza que exigía el juez.

A lo largo de su vida publicó gran cantidad de artículos, declaraciones políticas y textos de formación que acompañaban a sus constantes charlas en los más diversos lugares, incluida especialmente América Latina, hasta que ya en los últimos años tuvo que ir renunciando a desplazarse a causa de su enfermedad. Entre sus trabajos se pueden destacar La guerra civil española en Euskadi y Catalunya: contrastes y convergencias (2006) y Conversaciones con la izquierda anticapitalista (2012), además de los que fue coautor, como Porto Alegre se mueve (2003), 1968. El mundo pudo cambiar de base (2008) y Pobreza 2.0 (2012). Toda una labor que reflejaba tanto su preocupación por transmitir las enseñanzas del pasado a las nuevas generaciones como su esfuerzo por aprender de experiencias como las del movimiento antiglobalización o el 15-M, aportando siempre sus lúcidos análisis y reflexiones a la búsqueda de nuevos caminos y herramientas de intervención política para la izquierda alternativa. Porque, como él mismo escribió, formaba parte de “la pequeña parte de esa generación (la del 68) a quienes la voluntad de luchar por la revolución social no se nos pasó con los años”.

Para quienes hemos compartido una trayectoria política común y, sobre todo, una profunda amistad dispuesta a resistir todas las pruebas a lo largo de estos casi 50 años, es difícil expresar lo que se siente ante su desaparición. El próximo 1 de marzo nos reuniremos en Madrid para rendirle nuestro homenaje.

Jaime Pastor es profesor de Ciencia Política en la UNED.

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