Bildu se divide y no condena los rebrotes de ‘kale borroka’
La coalición se ausenta de la reunión de la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Barakaldo
EH Bildu es incapaz todavía de articular una posición inequívoca de condena contra la violencia callejera. De hecho, este viernes, mientras el dirigente abertzale Joseba Permach expresaba "de forma clara y nítida" su "más absoluto rechazo" al ataque contra la sede del PP de Barakaldo, la coalición soberanista se ausentaba de la reunión de la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de esta localidad vizcaína, en la que se condenó este atentado. Además, EH Bildu tampoco asistió al homenaje a "todas las víctimas del terrorismo", celebrado en Getxo (Bizkaia) con motivo del Día de la Memoria, un reconocimiento instituido en 2009.
Frente a este doble lenguaje, el resto de partidos aprovechó para reclamar a los dirigentes de EH Bildu que "rechacen con contundencia los ataques de violencia callejera" contra las sedes del PP. Sin embargo, la portavoz independentista en el Parlamento vasco, Laura Mintegi, no dudó en equiparar su inquietud por los actos de kale borroka con "la violencia económica" y con "la política" ya que "todas ellas preocupan", dijo. "Todos los días, desgraciadamente, se producen sucesos de violencia de un tipo o de otro, política o económica, que no traen nada bueno", añadió. No obstante, la portavoz abertzale en el Ayuntamiento de Bilbao reprobó en el pleno del pasado jueves la quema de contenedores.
Consciente del alcance de estas manifestaciones, EH Bildu envió horas después un comunicado donde "reitera" su "rechazo expreso" a los últimos ataques de violencia callejera "de los últimos días" y advierte de que "no benefician a quien desee la paz". La coalición insiste en su nota en reclamar la desaparición de "todas las violencias sin ninguna excepción".
En paralelo, Bildu mantiene su apoyo a la situación de los presos de ETA y así en el Ayuntamiento de Vitoria presentó ayer una moción en la que se reclamaba el final de la dispersión. La iniciativa fue derrotada con los votos de PP (9) y PSE (6), aunque tuvo el apoyo de los seis concejales del PNV.
