La sanción al PSC por la disciplina de voto queda en una “amonestación verbal”

Los nuevos tiempos que recorren las filas del PSOE y del PSC por su voluntad de acercamiento y de minimizar la discrepancia sobre el derecho a decidir en Cataluña les lleva a olvidar el pasado, aunque sea muy reciente, y a abrir una etapa nueva en la búsqueda de “colaboración y entendimiento”. Estas son las razones que han llevado a la dirección del Grupo Parlamentario Socialista a imponer a 12 diputados del PSC la sanción mínima que prevé su reglamento interno por indisciplinas. Esa sanción consiste en una “amonestación verbal” para que no vuelva a ocurrir. El pasado 29 de octubre, 12 diputados del PSC –son 14, pero dos no estaban en el Congreso– se abstuvieron en la votación sobre el derecho a decidir que planteó UPyD. Se trataba de remachar que ese derecho corresponde a todos los ciudadanos españoles y no solo a los catalanes. Tan solo hace ocho meses los diputados del PSC votaron en contra del resto del grupo parlamentario y fueron sancionados con 600 euros, la máxima penalización.

Hubo muchas horas de negociación pero al final los 12 diputados del PSC comunicaron a la portavoz del Grupo Socialista que no podían votar a favor de esa propuesta de UPyD en tanto que el resto del grupo socialista sí lo hizo. Los mecanismos sancionadores se pusieron en marcha de manera que la portavoz Soraya Rodríguez les anunció la apertura de un expediente por esa razón. Las alegaciones de los diputados catalanes se han centrado en recordar a la portavoz “los esfuerzos” para tratar de llegar a un acuerdo que, al final, no pudo ser.

La diferencia era política, no reglamentaria, ni formal, reconocen en ambas partes por lo que el asunto trascendía a la propia dinámica del grupo parlamentario para trasladar la discusión a las direcciones de los dos partidos. En paralelo se han producido esas conversaciones e incluso se menciona la celebración de la Conferencia Política de hace dos semanas. En torno a ese evento los dos dirigentes del PSOE y del PSC, Alfredo Pérez Rubalcaba y Pere Navarro, respectivamente, expresaron su voluntad de trabajar por mantener la convivencia a pesar del reconocimiento de las diferencias.

Pero es un tiempo nuevo, remachan en el PSOE, y en función del mismo la sanción a los 12 diputados del PSC tenía que ser liviana. “Expresamos la voluntad de trabajar en un clima de confianza mutua para evitar que vuelva a ocurrir un hecho como el que ha dado lugar al expediente”, señalan en fuentes del grupo socialista. El asunto ha quedado cerrado.