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El secretario de las Infantas se declara inocente y pide comparecer ante el juez

Afirma que por su relación especial no pudo negarse a las ayudas que le pedían “En ningún caso hice esas gestiones como representante de la Casa del Rey”

El secretario de las infantas Elena y Cristina, Carlos García Revenga, que fue tesorero del Instituto Nóos, hizo público ayer un comunicado en el que se declara inocente en el caso Urdangarin y anuncia que solicitará comparecer ante el juez de Palma de Mallorca José Castro. “Declaro mi inocencia respecto de las actividades que se investigan en la citada causa”, afirma, “ante las noticias e interpretaciones” publicadas.

La reacción de García Revenga se produjo horas después de que EL PAÍS publicara que el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, había hecho llegar al juez varios correos electrónicos que le sitúan en el núcleo de Nóos. En uno de esos correos, pedía figurar como miembro “de la Casa del Rey”.

En su comunicado, García Revenga afirma: “Pese a mi condición de tesorero del Instituto Nóos, nunca tuve firma autorizada en sus cuentas, ni poder de decisión en la gestión de las mismas ni en su contabilidad; y, de ninguna forma, directa o indirectamente, he recibido ningún tipo de remuneración ni de beneficio”.

“Es cierto”, prosigue, “que desde mi cargo de asesor de las infantas doña Elena y doña Cristina he podido mezclar, en ocasiones, gestiones propias de mi puesto con otras relacionadas con actividades privadas de los duques de Palma. La razón de este hecho viene motivada porque en los 20 años que he ejercido el cargo de asesor de las infantas doña Elena y doña Cristina se ha producido una relación más estrecha que la estrictamente profesional, no pudiéndome negar, en razón de esta circunstancia, a prestar las ayudas que me solicitaban”. Y añade: “En ningún caso he llevado a cabo estas gestiones como representante de la Casa de Su Majestad el Rey, ni por supuesto han sido contrarias a cualquier principio moral o de ética profesional”.

Más adelante, señala: “La función de asesor o de secretario, como se me cita en los medios de comunicación, lleva de manera implícita, por la propia definición del puesto, una actuación rigurosamente discreta de los cometidos encomendados”.

“Además”, argumenta, “dada la ingente cantidad de información que actualmente se difunde sobre mi relación con las actividades del duque de Palma, creo que no es el camino adecuado desmentir a los medios de comunicación ni entrar a precisar matices ni corregir imprecisiones sobre los e-mails publicados. Sin embargo, considero que el camino adecuado, y así lo voy a solicitar al señor juez que instruye la causa, es que me llame a declarar. Entiendo que es en el ámbito judicial donde es más conveniente expresar mi relación con este caso”.

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