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Francia envía a prisión a la dirigente etarra Izaskun Lesaka y a Joseba Iturbide

Los dos presuntos terroristas fueron detenidos el domingo en Mâcon, en el este de Francia.

Lesaka, en el hotel en Mâcon (Francia) donde fue arrestada.
Lesaka, en el hotel en Mâcon (Francia) donde fue arrestada. Laurent Cipriani (AP)

La dirigente etarra Izaskun Lesaka fue enviada anoche a prisión, al igual que su pareja y lugarteniente, Joseba Iturbide, después de haber sido imputada como dirigente de la organización terrorista, entre otros cargos, por la juez instructora parisiense Laurence Le Vert, han informado fuentes judiciales.

Lesaka e Iturbide, arrestados la madrugada del pasado domingo en un hotel de Mâcon (este de Francia), fueron procesados conjuntamente por pertenencia a organización terrorista , tenencia y transporte de armas y munición, transporte de explosivos así como por llevar encima documentos administrativos y privados falsificados, señalaron las fuentes.

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Tras comparecer ante la juez antiterrorista Le Vert, los dos detenidos declararon ante el magistrado de las libertades y la detención, que decretó su ingreso en prisión. Lesaka tiene pendientes de cumplimiento en Francia dos condenas de seis y cuatro años, dictadas en rebeldía, respectivamente, en 2007 y en enero de este año, por su pertenencia a la banda.

Está considerada por el Ministerio español del Interior la responsable de la estructura operativa de ETA, de sus depósitos de armas y explosivos, así como desde hace dos años de ser uno de los tres miembros (con David Pla e Iratxe Sorzábal) de la cúpula de la organización terrorista. Iturbide Ochoteco, pareja de Lesaka Argüelles, actuaba como su lugarteniente, según las fuerzas del orden españolas, que le consideraban huido a Francia desde enero de 2008.

Su arresto el domingo de madrugada, en un apartotel en el que llevaban alojados cinco días, tuvo un epílogo rocambolesco cuando los policías dejaron momentáneamente olvidadas en el exterior del establecimiento varias bolsas con material que les habían requisado.

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Varios periodistas que seguían la operación descubrieron las bolsas cuando se marcharon los agentes, y vieron que en su interior había una pistola, un ordenador portátil, una cámara de fotos con numerosas tarjetas de memoria, un documento nacional de identidad falso, mochilas vacías, mapas y brújulas, además de numerosos sobres sellados en los que se señalaba que había ropa o documentos.

El enterarse, la responsable del hotel ordenó recoger las bolsas y alertó a la policía, que trató de quitar importancia a ese episodio, y estima que no debería acarrear la invalidación de pruebas.

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