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Ignacio González llama a una “respuesta contundente contra el independentismo”

El presidente madrileño se compromete a no subir los impuestos durante su mandato

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, se ha despachado hoy contra los movimientos independentistas y contra el anterior Gobierno socialista, al tiempo que se ha comprometido a no subir impuestos. Ante un grupo de empresarios asistentes a la asamblea de patronales de capitales europeas (OPCE), entre los que estaba el catalán Juan Rosell, presidente de la CEOE, ha defendido la unidad y la Constitución española "frente al separatismo que reclaman líderes nacionalistas que pretenden ocultar el resultado penoso de décadas de nefasta gestión con banderas independentistas". 

"La deriva independentista", ha continuado González, "está basada en falsedades, es una irresponsabilidad y constituye una traición a los españoles, que están haciendo un gran esfuerzo para que todos juntos salgamos de una crisis muy profunda". Insistiendo en el mensaje, ha proseguido: "Por eso, el planteamiento independentista exige una respuesta contundente desde la Constitución y el respeto a la soberanía nacional, no hay alternativa a la unidad y no caben independentismos ni modelos federales por mucho que se les ponga el adjetivo de solidarios, de cooperativos y simétricos, simplemente no caben", ha agregado. "Confundir el derecho a la diferencia con la diferencia de derechos es abocar a un Estado residual e ineficaz incapaz de garantizar la igualdad, la cohesión, la justicia, la educación común o una política exterior coherente".

Aznar carga contra la "deslealtad" de los nacionalistas

El expresidente del Gobierno José maría Aznar ha cargado hoy contra los planteamientos nacionalistas desde Miami, donde ha participado en un  homenaje a la Constitución de 1812.

En ese contexto, el presidente de la fundación FAES, cocina ideológica del PP, ha asegurado que “la Constitución española actual ha venido a dotar de continuidad y estabilidad a la organización política de la nación española", de lo que han "disfrutado las últimas generaciones de españoles". Y de ello, ha añadido, "esperamos seguir disfrutando, más allá de dificultades tan terribles, como la del terrorismo, que hemos tenido que afrontar durante estos años”.

Se refería Aznar, sin referencias directas a Artur Mas o a Iñigo urkullu, a las "dificultades de la coyuntura presente de crisis económica, que, además, algunos están aprovechando con grave deslealtad para dañar el interés común en beneficio de sus intereses particulares, o, sencillamente, para tapar sus errores con la vieja táctica de distraer a los ciudadanos con un escándalo inducido todavía mayor”.

González ha destacado, además, cuatro objetivos que van a marcar su línea de actuación: no subir impuestos, destinar todos los recursos económicos para que autónomos y pymes puedan contratar, prestar de manera eficaz los servicios públicos esenciales y cumplir el objetivo de déficit marcado por el Gobierno. El presidente madrileño aseguró que su Gobierno hará todos los esfuerzos necesarios para salir de la crisis, pero que eso no supondrá subir los impuestos a los ciudadanos. “Se ha demostrado”, dijo, “que no subir impuestos y, cuando se pude, bajarlos, es la mejor receta para egnerar inversión y confianza”. Y para eello pidió colaboración a los empresarios. Según González, además, las políticas económicas deben evitar el exceso de intervencionismo, de regulación y de sobrepeso del sector público.

En ese punto, el presidente madrileño ha arremetido contra el anterior Gobierno socialista. "Lo que necesita España es que se deje de hablar de lo mío o lo tuyo para hacerlo por lo nuestro y lo de todos", ha recalcado. "La débil defensa de los intereses nacionales en el exterior durante el Gobierno socialista y los acontecimientos interplanetarios están también detrás de la gran crisis económica que azota a nuestro país". González ha subrayado que en la etapa anterior se pasó de ser de un país con un superávit a tener un déficit del 10% en solo dos años.

En ese sentido, ha  recalcado que no tiene sentido fraccionar el mercado "con absurdas barreras erigidas por las decisiones de algunas regiones", como tampoco tiene lógica "esa maraña de leyes autonómicas que impide que los empresarios extranjeros inviertan en España y los nacionales puedan desarrollar su actividad económica en todo el territorio nacional".  "No es sensato", ha enfatizado, "que una nación con siglos de historia compartida esté hablando de la independencia de algunas regiones o de si unas se dedican a quitar el dinero a las otras". 

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En ese contexto, ha recordado que Madrid es la más solidaria de España, reportando nada menos que el 73% al fondo de garantías de servicios esenciales. Esto es, 2.500 millones de euros, frente a los 718 de Cataluña.

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