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El Rey: “Soy optimista y no estoy nada, nada cansado”

Don Juan Carlos, satisfecho del apoyo a España de los presidentes de Chile, Perú, Colombia y México

Miguel González

“Están preocupados, están preocupados de que Europa tome medidas, de que cada país tenga que tomar las suyas, pero están muy al lado nuestro y muy en plan de ayudar y apoyarnos”. Con estas palabras se refirió en la noche del miércoles el Rey a la actitud de los mandatarios latinoamericanos ante la situación de la economía española, tras reunirse con los presidentes de Chile, Sebastián Piñera; México, Felipe Calderón; Perú, Ollanta Humala; y Colombia, Juan Manuel Santos. Preguntado si él mismo es optimistas respecto sobre una rápida salida de la crisis, contestó: “Yo siempre lo soy”.

Don Juan Carlos fue el invitado de honor de la cumbre constitutiva de la Alianza del Pacífico, celebrada en el cerro Paranal, a 146 kilómetros de la localidad chilena de Antofagasta. “Ha sido fantástico”, afirmó, en unas breves declaraciones a los periodistas, poco antes de emprender viaje de regreso a Madrid. “Yo creo que hemos preparado el que vayan los presidentes a la cumbre [Iberoamericana de Cádiz, en noviembre próximo]. O sea que en principio han dicho los cuatro que van a ir. Estoy muy contento”.

Garantizar que no se repita en Cádiz el fiasco de la Cumbre Iberoamericana de diciembre pasado en Asunción (Paraguay), a la que faltaron la mitad de los mandatarios, era el primer objetivo del viaje de más de 22.000 kilómetros que, a lo largo de tres días, ha llevado al Rey a Brasil y Chile. Tras haberse asegurado el lunes de que acudirá la brasileña Dilma Rousseff, ayer confirmó la presencia de otros cuatro presidentes.

El éxito de la cumbre de Cádiz, de la que don Juan Carlos será anfitrión, estaba amenazado por un posible boicot de la presidente argentina Cristina Fernández, debido a la crisis desencadenada por la incautación de YPF, y la siempre imprevisible reacción del los países del eje bolivariano. Lo más difícil era convencer a Rousseff, ya que Brasil siempre se ha mostrado displicente con la comunidad Iberoamericana, donde no tiene el protagonismo de otros foros. El Rey, sin embargo, le arrancó el compromiso de que irá a Cádiz e incluso prolongará su estancia en España tras la cumbre. Rousseff ya ha estado dos veces en visita privada en España este año –en Sevilla y Granada--, pero nunca en visita oficial.

El otro objetivo de la gira era vender la solidez y capacidad de recuperación de la economía española, pese a sus actuales dificultades. Don Juan Carlos ha viajado arropado por una delegación empresarial sin precedentes en lo que supone la puesta de largo de la Marca España, una operación de marketing dirigida a rehabilitar la deteriorada imagen de país. Y ha empezado donde más nos importa y nos duele: en América Latina.

Preguntado si se siente cansado tras someterse a un viaje tan largo y fatigoso, cuando aún se encuentra convaleciente de su doble intervención de cadera, el Rey ha contestado sonriendo: “Nada, nada. Encantadísimo, cuanto más mejor”.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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