_
_
_
_
_

No se ha subido el IVA porque es “dañino para el crecimiento”

El Gobierno ha optado por aumentar el IRPF, las rentas del capital y el IBI

C. E. C.

Desde hace meses, el debate en el mundo económico cercano al PP partía de la base de que el Gobierno de Mariano Rajoy tendría que subir impuestos. Y todo el mundo hablaba de uno en particular: el IVA. Sin embargo, el propio Rajoy lo descartaba insistentemente y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, era uno de los máximos enemigos de esa supuesta subida. El PP hizo campaña por toda España cuando el PSOE lo subió. “No más IVA”, se llamaba, y Rajoy participó en la recogida de firmas.

Finalmente, aunque quedan las decisiones más relevantes y aún más graves de marzo, se ha optado por el IRPF, las rentas del capital y el IBI y se ha dejado como estaba el IVA, aún uno de los más bajos de Europa pese a la última subida. El ministro de Economía, Luis de Guindos, explicó por qué se ha optado por no tocar el IVA: “Hemos elegido tocar los impuestos que entendemos menos dañinos para el crecimiento económico para España. En cualquier caso, estamos hablando de un gravamen temporal extraordinario. Se ha buscado la equidad, con impuestos progresivos, y eso con el IVA no es posible”, sentenció De Guindos.

Afecta al consumo

El ministro utilizó así esta decisión política para desactivar las posibles críticas desde la izquierda. Se ha optado por atacar a las rentas altas en el IRPF, un impuesto progresivo y por tanto redistributivo, y se ha dejado sin tocar el IVA, que afecta mucho al consumo, según insistía Montoro para oponerse a su subida, y que además es un impuesto mucho más injusto. Aún así, las medidas del PP no han hecho más que empezar, por lo que no hay que descartar nada para reducir el déficit, un compromiso firme que Rajoy ha mantenido en reuniones internacionales, en especial con Angela Merkel, para buscar ayuda europea para que el BCE respalde a la deuda española.

También ha decidido el Ejecutivo de momento no tocar el impuesto de sociedades, el que afecta a las empresas pero también a las grandes fortunas, que derivan a través de sociedades sus capitales.

El argumento es que se está desplomando la recaudación de este impuesto por la caída de beneficios y no es momento para subirlo. De hecho, Rajoy ha prometido bajarlo cinco puntos a las pymes. Algunas empresas del IBEX 35 mantienen casi intactos sus beneficios o incluso los mejoran pese a la crisis.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_