Iberoamérica vuelve a tener secretaría de Estado propia
Margallo situó la construcción europea, y la relación con Latinoamérica y EE UU como prioridades
La ya ex ministra Trinidad Jiménez se llevó ayer una agradable sorpresa en su despedida del Exteriores: su antiguo departamento volverá a tener una Secretaría de Estado para Iberoamérica; precisamente el puesto que ella estrenó en 2006 y que la poda de altos cargos de 2010 obligó a fusionar con la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores.
Ahora reaparece, para evitar que en la Cumbre Iberoamericana de Cádiz de 2012 se repita el fiasco de la reciente cita de Asunción (Paraguay), a la que faltaron la mitad de los mandatarios invitados, y también para recuperar el terreno perdido en un continente en el que España pierde influencia en favor de potencias como Brasil o China.
La recuperación de la la Secretaría de Estado para Iberoamérica la paga cooperación, que se fusiona con Asuntos Exteriores y deja de tener personalidad propia. La Coordinadora Estatal de ONG expresó su preocupación por lo que considera un síntoma de que la ayuda española al desarrollo sufrirá nuevos recortes y se subordinará a intereses comerciales.
En su toma de posesión, el nuevo ministro, José Manuel García Margallo, llamó al consenso en política exterior y situó la construcción europea, la relación con Latinaoamérica y con EE UU como prioridades.
El eurodiputado del PP Íñigo Menéndez de Vigo será el nuevo secretario de Estado para la UE, mientras que para Iberoamércica y Asuntos Exteriores y Cooperación se barajan los nombres del diplomático Eduardo Gutiérrez y del también eurodiputado Francisco Millán, cuñado de Rajoy.
Sobre la firma
